Hoy, el universo PlayStation es menos diverso y original. Japan Studio ha certificado su adiós al desaparecer de la lista en la que la web de PlayStation incluye las compañías integrantes de PlayStation Studios. Su hueco ha sido ocupado por Team Asobi, los desarrolladores de Astro’s Playroom. Por otro lado, curiosamente, aún no se ha reflejado la adquisición de Housemarque.
Un final esperado
«El veterano talento detrás de algunos de los títulos más originales de PlayStation». Así definía Sony a Japan Studio, equipo artífice de sagas tan queridas como Ape Escape o Gravity Rush. Sin duda, esta ha sido la crónica de una muerte anunciada. El pasado 1 de abril, Sony reorganizó Japan Studio para dar paso a una nueva organización, lo que provocó que la mayoría de su personal de desarrollo se marchara.
Una parte de los trabajadores se ha unido a Team Asobi. Otros han seguido a Keiichiro Toyama, director de Silent Hill y Gravity Rush, quien se despidió el año pasado y fundó Bokeh Game Studio. Precisamente, hace unos días, Kazunobu Sato, otro de los fundadores de esta nueva empresa, dio más detalles sobre la salida de las figuras más representativas de Japan Studio, así como sobre el juego de terror que están preparando.
Todo parece indicar que este divorcio comenzó a fraguarse porque Japan Studio deseaba crear obras destinadas principalmente al mercado japonés, aunque con potencial para llegar a un público mayor. Por el contrario, Sony estaba interesada en éxitos globales como los producidos por Naughty Dog o Insomniac Games.
Un legado imborrable
Resulta duro despedirse del que era, hasta ahora, el estudio más antiguo de Sony Interactive Entertainment. Siempre nos quedarán títulos como LocoRoco o sus colaboraciones en obras como Bloodborne o The Last Guardian. Deseamos la mayor de las suertes a todos sus trabajadores, con independencia del lugar al que hayan ido.
