Japón, años 90, una escuela, un juego, un misterio que resolver…
En estas fechas tan señadas estamos ya poniendo el broche de oro en cuestión a videojuegos con los últimos títulos que nos llegan al mercado. En el día de hoy regresamos una nueva entrega terrorífica de una propuesta que mezcla lo mejor del terror más nipón con toques de novela visual que harán llamar la atención de bastante gente. ¿El resultado final? No esperéis más en descubrirlo porque comenzamos el análisis en PS5 de Yuoni.
JUGUEMOS UN POCO MÁS
Yuoni nos ubica en el Japón de los años 90 en una típica escuela nipona donde tomaremos el control de Ai, una niña de primaria que ha comenzado a escuchar la misteriosa historia que rodea aquellas paredes. Un juego, una muñeca y un niño con un desenlace fatal aguardan a ser descubiertos para poner fin al desastre empezado.
La historia de Yuoni tiene más sombras que luces en líneas generales y aunque me parece inteligente la forma que tiene de contarla esta se diluye mucho debido a la falta de empatía que cogemos con unos personajes que no tienen ningún tipo de personalidad. Mientras avancemos por los capítulos per se de la aventura se nos irán relatando los hechos a modo de flashbacks con los que podremos conocer más acerca del pasado de nuestro misterioso amigo con el que no podemos parar de jugar. Sin embargo cuando finalizamos el juego y reiniciamos por llamarlo de alguna manera, lo que tenemos con nosotros son secuencias de novela visual donde será a partir de la mera lectura como conseguimos avanzar en la historia principal y conocemos más sobre lo que está sucediendo alrededor de nuestra protagonista.
Con todo esto no quiero decir que sea una mala historia ni mucho menos, las bases están bien sentadas, la ambientación está bien desarrollada y las reglas del juego se ponen de forma clara sobre la mesa para que conozcamos todos nuestros propósitos desde el primer momento. Sin embargo no puedo evitar caer en el pesar de que la trama se queda muy plana y durante las secciones jugables se diluye demasiado hasta que conseguimos avanzar. No se consigue encontrar un buen ritmo que incite al jugador a querer conocer más sobre ese misterio. Este es el punto clave que quería tratar, las historias de terror y este tipo de títulos no son para todos los públicos pero si hay algo que puede hacer que el jugador haga un esfuerzo extra y se enfrente a una propuesta de este tipo es sin lugar a duda la historia y Yuoni no motiva al jugador menos fanático de estos títulos a hacer ese sacrificio.
UN ESCONDITE MORTAL
Respecto a la jugabilidad hay bastante de lo que hablar pero debemos partir de una premisa básica que el juego nos plantea para poder superar cada capítulo. Tenemos un escondite y un objetivo para poder escapar, conseguir la muñeca y regresar detrás de nuestros pasos para quemarla y volver a la realidad. Sencillo ¿Verdad? Pues bien mentira porque de camino hasta ese fin tendremos que escondernos y contener la respiración de forma literal para evadir a una especie de espíritus que aun siendo ciegos tienen una percepción sensorial formidable. Esto a su vez lo alterna con unas fases de persecución que sin duda es lo que menos me han convencido para poner fin a cada uno de los capítulos. Son muy ortodoxas y poco orgánicas, no generan tensión ni son disfrutables, se pierde el punto de tensión en todo momento en pos de un laberinto para toda nuestra memoria intentando recordar el pasillo por el que fuimos la primera vez.
En conclusión para este apartado considero que tiene unas bases jugables más que interesantes con la idea del sigilo y las sombras y tener que contener la respiración de forma manual. Sin embargo es harto obvio que está poco pulido y las mecánicas acaban siendo muy toscas conforme avanzamos en la aventura, muy repetitivo.
EL COLEGIO INFINITO
Un concepto que vengo repitiendo a lo largo del análisis y que es uno de los peores puntos ya que si a nivel gráfico dadas las características del título se le puede pedir poco si que voy a hacer una crítica aguda a su arte. El potencial que tenían mezclando una típica escuela japonesa y hacer uso de elementos ambientales terroríficos junto a este terror tan psicológico al que estamos acostumbrados que nos traigan desde Japón se queda muy atrás de lo deseado.
Prácticamente cada capítulo es un calco del anterior y la sensación de estar repitiendo lo mismo una y otra vez será un obstáculo mucho mayor que el terror que puede experimentar el jugador.
Puntos positivos:
- Una historia interesante y sencilla
- Mecánicas novedosas en el género.
- Ambientación bien lograda.
Puntos negativos:
- Todos los elementos se quedan muy justos, conjunto plano.
- No equilibra bien la narrativa jugable con la visual.
- Le falla el desarrollo de ciertos personajes protagonistas
