THE DIOFIELD CHRONICLE PRIMERAS IMPRESIONES EN PS5
Hace apenas unos meses en un tradicional evento de State of Play centrado en el desarrollo de juegos japoneses, apareció en nuestros monitores una nueva obra distribuida por Square Enix y desarrollada por el equipo de Lancarse, conocidos por la obra de Monark. Pues bien, a las puertas de su estreno para este próximo mes de septiembre, concretamente el día 22, hemos tenido acceso anticipado a la demo de su próxima aventura que pretende encandilar a crítica y público. Así que tomad asiento porque hoy toca hablar largo y tendido de las primeras impresiones en PS5 de The DioField Chronicle.
MERCENARIOS AL PODER
Arrancamos con uno de los puntos más destacados de esta demo y probablemente una de las piedras angulares para el éxito de la versión completa y es que The DioField Chronicle pone un gran peso en la trama desde el primer segundo con su cinemática de presentación. El universo del videojuego está en un completo caos donde el avance del imperio a nuevas tierras afecto de pleno a nuestros protagonistas, que tras ser rescatados de una escaramuza, entran a filas de un importante grupo de mercenarios donde sus trabajos para un conde del territorio será el comienzo de una gran historia.
Una tierra sumida en tres facciones donde el Imperio lucha contra la alianza la cual se resiste a ser invadida y la isla de DioField donde transcurre la acción principal de la aventura y que ha tornado en ser el centro de todos los focos debido a su increíble potencial en cuestión a recursos naturales se refiere.
¿Hasta aquí todo correcto, no? Una historia habitual dentro del género, con un gran interés bélico y político que nos mantiene en ascuas intentando descubrir el siguiente giro de guion y cuál puede ser el próximo ataque que se produzca. El problema es que el videojuego al menos bajo mi punto de opinión, y este es un lastre que viene de lejos dentro del estudio, es la forma de plantear al jugador la trama, super confusa, tediosa y en ocasiones difícil de seguir desde un primer momento. El bombardeo de información, nombres y facciones que se nos presentan en las primeras horas de esta demo realmente no son muchos pero la forma de hacerlo hace que sea de difícil comprensión averiguar realmente qué estamos haciendo y a quién estamos protegiendo.
Es más, hasta prácticamente la última misión de la aventura, la historia no queda del todo clara y esto se solventa gracias a que se libera la sala de la biblioteca, la cual nos permite leer todos los documentos posibles en relación a los personajes, facciones y conflictos del pasado. Gracias a esto, se puede avanzar ya sin problemas en la trama principal conociendo todos los puntos principales que nos permitirán disfrutar de una historia que con lo que poco que se nos ha permitido jugar hasta la fecha de momento promete y para bien a pesar de los defectos de planteamiento.
Sin embargo respecto al elenco de personajes protagonistas encontramos luces y sombras ya que el planteamiento de su presentación y el corto desarrollo en estas primeras horas de lo mismo se hace ya demasiado visto, poco fresco e incluso la inclusión de algunos de ellos al equipo es hasta irrisoria. Llega al punto de, me uno a vuestra causa porque hoy me he despertado con el día libre y mejor que estar tirado al fresco pues salgo con vosotros a repartir unos cuantos espadazos.
No digo con este alarde que ni mucho menos sea un grupo malo ni nada por el estilo sino que queda poco natural su conformación y las pequeñas misiones o diálogos que parece se nos van a ir habilitando para conocerlos mejor, no creo que vayan a ser un elemento diferencial. Más si cabe aún que por lo que aparenta, toda la historia va a girar en torno a los muros de nuestra base de campaña donde el recorrido se hará tremendamente repetitivo, una de las mayores flaquezas no solo del juego sino de cualquier juego táctico en general. Por lo que para este apartado más que quedarnos con malas impresiones prefiero emplazarme a la versión final para ver si he incurrido en un prejuicio preconcebido o una mala impresión y el videojuego, aún siendo conservador, igual tiene algo muy potente con lo que hacerme cambiar de idea.
¿POINT AND CLICK? ¿TÁCTICO? ¿CÓMO JUEGO A ESTO?
Ya desde el primer vistazo que tuvimos con su tráiler, lo que más destaco del videojuego fue la propuesta jugable la cual parecía en un principio por lo visto apuntar de pleno al género del JRPG táctico siguiendo la estela que tan buenos resultados está teniendo Square Enix en la consola de Nintendo Switch. Sin embargo, las apariencias engañan y es de todo menos táctico ya que seremos nosotros los que como en varios juegos clásicos de estrategia de PC, tendremos que seleccionar a nuestros personajes de forma individual o en grupo a través de atajos o el cursos en pantalla, para que realice cierta acción, moverse o atacar básicamente. Con estos comandos se desarrolla la acción donde será importante el posicionamiento respecto del enemigo así como estar pendiente de las zonas o el sensor de los enemigos para no ser detectados de improvisto.
Sinceramente a mi este punto no me ha acabado de convencer, la falta de unas cuadriculas hace que muchas veces la selección con el cursor sea tosca y el posicionamiento de los personajes y el movimiento no sea el más adecuado posible en todo momento. Este sistema libre lo agradecería si lleváramos a cabo un control de grupos numerosos pero contando con cuatro personajes en pantalla aunque no es ni mucho menos detestable porque tiene grandes bondades, si que me ha parecido un tanto desacertado.
Porque precisamente la fortaleza de su jugabilidad está en todo lo demás la interacción con los elementos del escenario y sobre todo el uso de habilidades o magias así como las invocaciones más clásicas dentro de Square Enix. Estas son especialmente divertidas y llamativas a nivel visual, aportando el punto principal de estrategia a la hora de saber configurar nuestro equipo, combinar ataques y ahorrar en los puntos de PM. Donde este sistema brilla mucho en los enfrentamientos contra sus jefes los cuales tienen de momento los dos presentados, patrones muy distintos y son especialmente duros de batir.
Porque esta demo la hemos disfrutado en dificultad difícil y como era de esperar los picos de dificultad son muy notables, obligándote a repetir misiones ya superadas desde la base para subir de nivel o ganar más dinero para conseguir mejores armas y equipamiento. Además el videojuego cuenta con un típico sistema de árbol de habilidades activas y pasivas que conseguiremos desbloquear con los SP, obtenidos por superar los principales desafíos que se nos plantean al inicio de cada misión. Quedan todavía más elementos por desbloquear en la versión final y aunque las sensaciones en general respecto al sistema de combate son positivas, me quedo con la duda de si a la larga resultará demasiado repetitivo y empezarán a aflorar las carencias en cuanto al manejo de los personajes por encima de las bondades que he comentado.
THE DIOFIELD CHRONICLE: UN JUEGO DIGNO DE PROBAR
En líneas generales y como conclusión de estas primeras impresiones de The DioField Chronicle, puedo decir que es un juego un pelín por encima al menos en sus primeras horas, del nivel de calidad al que nos tienen acostumbrados desde Lancarse y desde el sello de Furyu. De momento son más los aspectos positivos que los negativos por lo que esperamos a la versión completa de un juego que por lo menos pienso que es merecedor de darle una oportunidad con la misma demo que se desbloqueará mañana mismo para todo el público.