ANÁLISIS ONE PIECE ODYSSEY
Tras más de una década en la que hemos visto mucho musou, lucha, experiencias para VR, e incluso sandbox, la franquicia de One Piece regresa con un nuevo juego de rol por turnos, cargado de novedades para el género y algún que otro desvarío por el camino.
Pero lejos de ser un mal juego, creemos que estamos ante la mejor aventura de los Sombrero de Paja; una combinación perfecta entre los mejores momentos de la serie recreados con un magistral apartado técnico, y un sistema de combates que aunque comete algún que otro fallo, está cargado de buenos matices.
De todo esto y más os venimos a hablar en nuestro análisis, pues ya hemos disfrutado a lo grande de la última propuesta de Bandai Namco, y tenemos muchas cosas que compartiros.
Isla de vuelta al pasado
La aventura dará lugar cuando la tripulación cae literalmente en una isla que rápidamente les cierra el camino y los deja sin posibilidad de escapar, para colmo, una misteriosa chica ha robado las habilidades de nuestra banda y disponemos de un arsenal bastante corto de técnicas.
Para recuperar lo que nos han robado, tendremos no solo que desentrañar los misterios de este sitio, sino que también explorar nuestros propios recuerdos en busca de lo que nos falta.
Aunque en un principio este reclamo ya está muy visto en otros juegos de la franquicia (explorar recuerdos pasados y enfrentarnos a enemigos ya vistos en la serie) la trama se expande gracias a la incursión de los dos nuevos personajes, que pueden ser tan profundos como cualquiera del manga, ya que están dibujados por el autor del mismo.
Además toca cada suceso de los arcos más importantes de la serie, con bastante sutiliza, matizando e introduciendo pequeños cambios, que no alteran el final de cada temporada, pero que si le da un aire más rolesco.
Por poner un ejemplo, la primera saga de serie que reviviremos será de Alabasta, y aquí no solo visitaremos los escenarios de las mayores contiendas, sino que también visitaremos cada estancia vivida por la tripulación en ese momento.
Si bien es cierto, hubieramos preferido una historia cien por cien original, estamos contento con el resultado, y nos ha parecido una manera muy interesante y divertida de hacer un resumen cargado de detalles de la misma.
Combates por turnos clásicos llenos de novedades
Lejos de tener las limitaciones de un JRPG tradicional en cuanto a los combates, Odyssey cuenta con los elementos necesarios de un buen título de este género, que son básicamente posibilidades para idear distintas estrategias para que nuestros combates sean únicos y divertidos.
Debilidades elementales, habilidades que afectan a uno o varios enemigos, e incluso la posibilidad de cambiar nuestra posición en combate hacen que su sistema de batalla sea algo único -con pocos elementos diferentes, pero variados-, lo cual podría ser muy divertido.
Y decimos podría, porque comete un gran fallo, y es la dificultad, en NextGame no hemos sabido muy bien como valorar el hecho de que el juego resulte sencillo en la mayor parte de su travesía, sin tener opción de cambiar la dificultad, ya que pensamos que Bandai Namco actualizará su obra tarde o temprano.
Por el momento nos quedamos con que ha estropeado un poco la sorpresa ya que el sistema de combate es muy abierto y lleno de posibilidades, pero el hecho de que resulte tan sencillo, reduce esas opciones a ir a piñón a por el enemigo, lo que hacen que sea más monótono.
Eso sí, no todos los presentes de un buen JRPG están presentes, ya que carecemos de la posibilidad de equiparnos armas o armaduras, pero en su lugar cuenta con un decente sistema de accesorios los cuales pueden ser combinados y aportan estrategias mixtas.
La exploración es lineal pero muy satisfactoria y con muchas tareas secundarias
Al margen de los combates, otro de los grandes apartados del juego es la exploración, desde que se lanzó el pasado 13 de enero hemos escuchado opiniones muy en contra de los escenarios lineales, pero ¿alguien se ha parado a pensar cuantos juegos de esta franquicia son de mundo abierto?
Sin contar las entregas para móviles o la de lucha, podemos asegurar que al menos los últimos diez capítulos cuentan con grandes escenarios, vacíos y carentes de cosas por hacer, y que por SUERTE, Odyssey no es así.
En su lugar tenemos una travesía más lineal, pero que lejos queda de ser solo un pasillo, ya que encontramos ciudades cargadas de cosas por hacer, rincones secretos y sitios que debemos revisitar.
A esto le sumamos que no todos los escenarios son tan cerrados como se ha comentado, ya que encontramos también grandes áreas abiertas como desiertos o bifurcaciones que nos lleva a caminos paralelos pero con jugosas recompensas.
Escenarios más vivos que nunca en la saga con especies autóctonas de la zona y un gran apartado gráfico (de esto ya hablaremos más adelante) y que invitan a la exploración y al disfrute de las vistas. En la vida pediríamos más a un juego de esta saga.
Por último, y para animar más el salseo, diremos que cada personaje cuenta con una característica única en el escenario, por lo que tendremos que ir variando al miembro de la tripulación mientras exploramos para dar con nuevos caminos u objetos, haciendo así de la exploración uno de sus platos fuertes.
Respecto a las tareas secundarias, encontramos misiones de Cazarecompensas donde debemos encontrar a un enemigo buscado y darle caza -siempre con el característico humor de la serie- algo que resulta sencillo porque están muy marcados en el mapa.
También hay un gran número de misiones secundarias, sencillas en argumento, ya que únicamente nos piden dar con un determinado enemigo, NPC u objeto, pero efectivas a la hora de hacer más completo el JRPG.
El Cel Shading a la altura de los grandes con un completo apartado audiovisual
One Piece es una franquicia que ha ido evolucionando con cada entrega en varios apartados, siendo uno de los más destacado el audiovisual, y es que con Odyssey lejos quedan atrás esas entregas donde los gráficos echaban para atrás, aquí tenemos lo más decente visto hasta la fecha.
Si tuviéramos que buscar un claro competidor de su estilo visual, destacaríamos claramente a Dragon Quest XI (el cual creemos que ha servido de inspiración en más de una cosa) lo cual no es quedarse corto.
Además, en consolas de nueva generación contamos con hasta 60 fotogramas por segundo, una resolución más que adecuada para este estilo gráfico y sobre todo una distancia de dibujado poco vista en los juegos de este estilo que nos permite disfrutar de las vistas como nunca.
Por si esto fuera poco, la banda sonora corre a cargo de Motoi Sakuraba, a quien recordaremos al instante por bandas sonoras como la de Dark Souls o algunas entregas de la saga Tales of, algo que como estaréis dispuestos, es más que adecuado para un juego que busca ser recordado como un buen JRPG.
Conclusiones
One Piece JRPG cumple con creces en lo imprescindible para un buen JRPG: tenemos un sistema de combate cargado de matices (pero arruinado en parte por la dificultad), un buen sistema de exploración, escenarios repletos de material que alarga la duración del juego, y un apartado audiovisual que nunca habíamos visto en un juego de anime.
Sin duda, no es perfecto, pero es más de lo que esperábamos, y si tuviéramos que buscar errores atribuiríamos todo el mérito a la falta de dificultad o a que la historia no es tan profunda como requiere este género.
Por lo demás, es todo un regalo para los fans de la franquicia y el género, y como pertenezcas a los dos grupos, podríamos decir que es tu mejor baza en un mes de enero cargado de títulos importantes.