No voy a ocultar mi sorpresa cuando se me dio el código de Moss para poder analizarlo. Este título fue presentado en el E3 de 2017 y ya en ese momento captó mi atención solamente por su estética pero una vez probado… la sensación es que ha mejorado mi impresión del juego. Sé que no es correcto empezar un análisis con una opinión que puede estar contenida directamente en el veredicto final pero es que el juego se lo merece.
Para empezar el diseño de mapas, aunque simple, destaca por su belleza. Quill, la pequeña ratoncita y heroína en esta aventura, rebosa de vida. Nosotros como el Lector, y gracias a la inmersión de las PSVR, formamos parte de la historia desde el primer momento y los personajes son conscientes de nuestra presencia. Si a eso le añadimos los efectos y la banda sonora estamos ante una combinación perfecta.
Moss además mezcla diferentes tipos de jugabilidad. En primer lugar controlaremos a Quill con nuestro DualShock dónde destacan los controles sencillos y que nos permitirán avanzar durante la aventura. Como Lector tendremos la posibilidad de interactuar con el mundo, gracias a la barra de luz del mando, pudiendo mover diversas plataformas u obstáculos o controlar a nuestros enemigos para abrir caminos o acabar con ellos.
La mezcla de géneros también es un punto a destacar en el juego. Habrá momentos de Acción dónde debamos derrotar a diversos enemigos mientras intentamos superar la zona. Habrá momentos dónde los rompecabezas serán importantes teniendo que controlar a ciertos enemigos y usar sus habilidades. Y por último las clásicas plataformas todo ello con el añadido que nos permite las PSVR.
La historia del juego se nos cuenta en forma de relato. Estaremos al principio del juego como en una especie de biblioteca y deberemos ir pasando las hojas de la manera tradicional mientras una voz nos relata la historia de las imágenes. Llegados a cierto momento de ese breve relato nos meterán dentro del mundo del juego dónde deberemos vivir la historia. Es una lástima que el juego esté en inglés pero esto no es un punto que le perjudique ya que permite la opción de mostrar los subtitulos y para los más peques les puede ayudar a seguir la historia.
Gráficamente como he dicho al principio, el mundo de Moss, es mágico. Un mundo vivo que une lo real y lo fantástico. Y las animaciones de Quill son simplemente perfectas parece de verdad como que estuviera enfrente nuestra y más cuando se nos permite interactuar con ella.
Conclusión
Si queréis vivir una verdadera aventura y ver lo que es un trabajo con realidad virtual bien hecho, Moss, es vuestra elección. Una historia bien narrada, unos personajes cuidados, un mundo que rebosa belleza… son muchos los calificativos que puede recibir esta aventura pero lo cierto es que Polyarc ha cuidado hasta el último detalle y se agradece. Esperemos que sea el principio de muchas aventuras acompañando a Quill y que haya más juegos de este calibre.
