Análisis de The Witch and the Hundred Knight 2

Secuela del título de NIPPON ICHI, que en esta ocasión es exclusivo para PS4, mostrando su lado más característico, la originalidad en sus diseños e historia, creando así un RPG de acción atractivo y desenfadado.
Nos ponemos en la piel de un pequeño peluche, que toma vida gracias a una bruja recién despertada dentro del cuerpo de una niña. Esa pequeña es la hermana de una Valkiria Sagrada, encargada de acabar con las brujas en el mundo, la cual se infectó con la enfermedad de las brujas al principio de la historia. Entorno a todo esto, gira una trama bastante bien cuidada al comenzar la aventura, pero que a medida que vas avanzando en la historia, se convierte en largas esperas de charlas interminables y bastante inocuas para nuestra experiencia dentro del juego.

Otro punto en su contra es que no está traducido al español en ningún momento, esto hace que sea un título con pocas posibilidades de ser jugado de una manera plena por un jugador que no sepa inglés con un nivel medio-alto, ya que tiene partes en que su vocabulario se enrevesa bastante y cuesta seguirlo sin el inglés adecuado.

Desde el punto de vista de la jugabilidad, es un juego que vive bastante de las mecánicas de su predecesor y que cae en sus mismos errores, puesto que en muchas partes de la partida, se convierte en un revienta botones con interrupciones de charlas interminables, lo que resulta bastante repetitivo. Pero no todo son malas noticias, ya que el sistema FACETS es un elemento bastante bueno de cara a los enfrentamientos con los malos, lo que hace que cambiemos el aspecto, las habilidades, estadísticas y equipamiento entre 9 posibles combinaciones.

El apartado audiovisual es el más cuidado, quizás el menos potente sea el gráfico, que aún así es el más ambicioso de la compañía en este aspecto, pero porque el sonoro es casi perfecto, un muy buen doblaje y una banda sonora genial, que acompaña a las mil maravillas la aventura junto con los efectos de sonido del ambiente y los enemigos.

En conclusión, este juego sirve para pasar un par de horas divertidas, pero que al avanzar resulta repetitivo y sin alma, ya que no te termina de enganchar como debería para no querer nunca de jugar. Un juego que pasa sin pena ni gloria por nuestra consola, que podría haber sido mejor aprovechado con mecánicas nuevas y una historia menos densa.