Black Book es un videojuego de rol por turnos desarrollado por el estudio Morteshka y editado por HypeTrain Digital. El juego nos ambienta en la Rusia de los zares de 1879. La historia se sitúa en un orfanato. Allí vemos que hay un anciano a cargo que instruye a una muchacha como bruja. Ella es reacia a aprender el oficio y se casa con un apuesto joven. Sin embargo él se quita la vida y es enterrado en el cementerio.
Una historia de lucha y retorno
Su marido ya está de camino al infierno, sin embargo nuestra protagonista (Vasilisa) no quiere aceptarlo y quiere traer su alma de vuelta. Para ello tendrá que romper los siete sellos del libro negro que Old Egor (el anciano del orfanato y nuestro mentor a lo largo de toda la aventura) mantenía en secreto. Por esa razón ella acepta convertirse en una bruja. Black Book se ambienta en Cherdyn en 1879. Al inicio de la aventura se abren las puertas del infierno y tendrás que adentrarte en él para salvar a tu marido rompiendo el primero de los siete sellos y volver al mundo real siendo ya una auténtica bruja.
Toma tus propias decisiones
Las conversaciones entre los personajes no son cinemáticas sino que son dibujados que van cambiando su semblante entre frase y frase. Podremos dar más de una respuesta en nuestros diálogos y estos determinarán el desarrollo de la aventura. Conforme va transcurriendo la acción en Black Book iremos tomando cierta decisión que podrán afectar a nuestro contador de pecado. Según las decisiones que vayamos tomando ese medidor de pecado irá aumentando y determinará el transcurso de los hechos de la historia del juego e incluso podremos ver finales diferentes dependiendo de ese medidor.
Bruja y consejera del pueblo
Viajeros, vecinos y espíritus irán a ti en busca de consejo para ayudarles en su día a día. Tú podrás darles una respuesta o decidir ayudarles en las misiones secundarias que se irán desbloqueando a lo largo del título. Si respondemos correctamente a sus peticiones obtendremos recompensas de experiencias que podremos canjear para mejorar nuestro mazo. Nuestras respuestas también podrán influir en el desarrollo de los posteriores eventos que se producirán dentro del juego. Podremos movernos por el mapamundi realizando una especie de viajes rápidos.
Explora todos los secretos de la antigua Rusia
En cierta medida Black Book nos recuerda un poco a Slay the Spire, ya que llegaremos a una localización y dependiendo de nuestras respuestas obtendremos una recompensa, podremos pasar a la siguiente localización o entraremos de lleno en una batalla. Al igual que en el popular juego de cartas también podremos seguir la línea recta en el mapa hasta nuestro objetivo o ir visitando diferentes localizaciones secundarias para descubrir secretos e ir mejorando a nuestro mazo y nuestra protagonista. En estas localizaciones los hechos serán narrados por una voz que irá relatando los sucesos de la historia. Ir completando misiones supondrá ir reclutando una especie de demonios o espíritus que tendremos a nuestra disposición y podremos enviar a realizar misiones en las que conseguiremos nuevos objetos. Estas misiones duran varios días y deberemos ir revisando su progreso cada vez que pasemos por un campamento base (hay varios a lo largo de todo el juego). Es importante mantenerles siempre entretenidos, ya que si no podrían llegar a aburrirse y proceder a torturarnos.
Combates por turnos con cartas
Los combates son al más puro estilo de un videojuego de rol por turnos, sin embargo no tendremos los habituales comandos de ataque, defensa y magia y/o habilidades, sino que tendremos un mazo de cartas a nuestra disposición que irá determinando el tipo de acciones que podremos realizar. Podremos utilizar cartas ofensivas que restan daño directamente, lanzar cartas que van minando la vida de nuestros rivales turno o turno o lanzar cartas defensivas (ya sea para aumentar nuestra defensa o barrera o incluso para modificar nuestros atributos o curar parte de la barra de vida). También será posible utilizar un objeto por turno y durante nuestro viaje contaremos con aliados que nos acompañaran en las batallas y que podrán realizar una habilidad que se irá recargando con el tiempo. Cada uno de estos ayudantes contará con una habilidad totalmente diferente. Podremos utilizar entre 3 y 5 cartas en cada turno y el ataque que realizará el enemigo en el siguiente turno vendrá indicado sobre su cabeza. De esta forma tendremos la posibilidad de plantear una estrategia de cara al combate y sobretodo preparar nuestra defensa para su siguiente acción ofensiva. Ir venciendo en los combates nos dará puntos que podremos ir canjeando por habilidades permanentes.
Pero no sólo tendremos a nuestra disposición los combates por turnos, sino que como todo buen juego de rol que se precie también cuenta con un juego de cartas llamado Durak al que podremos jugar a lo largo y ancho de todo el mapeado (ya sea en los campamentos base o en las localizaciones interactivas en las que tendremos que investigar un escenario). El objetivo de Durak será quedarse sin cartas en la mano. La última persona que se quede con cartas en la mano pierde.
Una estética oscura y una banda sonora sobrecogedora
Black Book cuenta con unos gráficos sencillos dibujados que destacan por sus tonos oscuros y por reflejar de una forma fiel la cultura popular de la rusia de esa época. La ambientación de los escenarios está basada en el gélido y encantado mundo de los cuentos populares rusos, siempre repletos de sombras. Exploraremos un mundo basado en esos mitos del norte de Rusia y la estética acompañará en todo momento esa tesitura. Aprenderemos más sobre esta mitología gracias a una enciclopedia incluida en el juego creada por expertos en antropología y que mantendrá esa estética oscura que rodea en todo momento a Black Book.
La banda sonora cuenta con piezas especialmente emotivas y hay una escena en la que la protagonista va camino de visitar la tumba de su difunto marido que nos ha parecido totalmente sobrecogedora. Los efectos de sonido cumplen y acompañan de forma correcta al desarrollo de los combates.
Conclusiones finales
Black Book es un videojuego que gustará a los fans de los juegos de rol con combates de cartas. Su planteamiento puede llegar a hacerse repetitivo con el tiempo y la historia no ha terminado de engancharnos y los diálogos se han convertido en un elemento accesorio. Nos habría gustado que la historia contase más y que los personajes pudiesen llegar a enamorarnos. Por otra parte, su combate sí funciona y tiene cierto elemento adictivo que nos mantendrá pegados a la pantalla. La duración del título variará en gran medida dependiendo de las misiones secundarias que queramos completar y de los caminos que queramos recorrer a lo largo y ancho de su amplio mapeado.
Uno de los puntos que menos nos ha gustado de Black Book es que el videojuego no llega traducido al castellano ni tampoco doblado. Nos llega con textos en inglés y doblaje únicamente disponible en el idioma natal de los desarrolladores.
