Gearbox Software vuelve 5 años después con la saga que catapultó al estudio a la fama: Borderlands. Después de lanzar The Pre-sequel, el último título que salía al mercado para las consolas de la pasada generación, el objetivo que tenían desde el equipo de desarrollo era llevar a las consolas actuales todos los títulos que habían salido anteriormente. Pero parecía que se había olvidado completamente de Borderlands 3, un título que se mencionaba de vez en cuando, pero de una forma tan sucinta que no sabíamos si eran simplemente rumores, información fiable y, en caso de que fuera esta última, parecía que el juego no avanzaba en su desarrollo.
Tras varios años de espera y remasterizaciones, llegó marzo y la PAX EAST 2019. Varios días antes de la feria ya comenzó a rumorearse de una manera bastante fuerte que al fin se mostraría el título. A partir de ahí una lluvia de vídeos, gameplays y muchísima información llegaba constantemente.
Como decimos, 5 años desde que saliera la última entrega de la saga y los seguidores, entre los que me incluyo, ansiosos de un nuevo Borderlands que al fin ha llegado. Ahora bien, ¿habrá merecido la pena tantos años de espera?
Comencemos, como solemos hacer, con la historia del título. Una historia que comenzaba un poco antes; durante una de las presentaciones que se han hecho del Borderlands 3 se anunciaba la llegada de un nuevo DLC para la segunda parte: La Comandante Lilith y la lucha por Sanctuary. Este contenido, que fue gratuito durante un tiempo, servía de introducción para esta tercera entrega, no es imprescindible jugarlo para entender la historia del nuevo título, aunque, obviamente, entenderemos más cosas desde un principio si lo jugamos.
Una historia de la que no quiero desvelar nada más allá de lo que se sabe. Nuestro objetivo, como Buscacámaras que encarnaremos, será encontrar las cámaras antes que nuestros enemigos, en esta ocasión un dúo formado por los hermanos Calypso.
Una trama con un trasfondo bastante interesante, pero que se desarrolla, como siempre en los juegos de Borderlands haciendo uso de unos personajes muy carismáticos, empleando un humor inteligente en ocasiones y absurdo o simple en otras, que hace que queramos continuar la historia, no solo por ver que pasará, sino qué próxima locura vamos a ver o escuchar. En este aspecto, la localización del título ha sido bastante trabajada, usando palabras y expresiones que solemos emplear tanto en nuestro día a día, como en redes sociales, como dice uno de los personajes del título “mis dieses” a este apartado.
Y es que, como hemos dicho, son estos personajes y el carisma de los mismos un punto a destacar del título. No solo de los protagonistas, de los que ya hablaremos más adelante, sino el resto de NPCs. Todos con una personalidad muy marcada, muchos de ellos nuestros amigos de anteriores entregas, así como otros nuevos que iremos conociendo poco a poco y se irán incorporando a nuestra aventura. Aunque sí, por encima de todos ellos hay que destacar a Claptrap. Como viene siendo habitual, es el personaje encargado de introducir a nuestro personaje en el mundo y, a los pocos minutos de juego, con su forma de actuar nos deja claro a qué tipo de juego hemos llegado.
Es este personaje, el que llega a esta nueva aventura el que tendremos que elegir nosotros. Podremos elegir entre cuatro distintos: Moze, la Artillera, Amara, la Sirena, FL4K, el Domabestias y Zane, el Agente. Por sus clases se puede intuir cuál es su rol en la batalla, a pesar de ello, salvo que prefieras un personaje equilibrado y más “estándar”, en cuyo caso debes elegir a Moze, es recomendable que inicies una partida con cada uno de ellos para ver sus habilidades y árboles de mejora, ya que son bastante amplios y diferentes, antes de comenzar la aventura para así hacerlo con el personaje que más se ajuste a la manera de jugar de cada uno.
En términos jugables, y tal vez este sea el punto que más se le pueda criticar a Borderlands 3, es que sigue una línea muy continuista con los anteriores. Pocas mejoras en este aspecto, aunque sí se debe aclarar que las pocas que tiene cambian bastante el gameplay. El juego sigue siendo un juego de acción y disparos en primera persona con elementos de RPG. Las novedades de las que hablo, relacionadas con el movimiento, me atrevería a decir, que beben mucho de los juegos de Respawn Entertainment, Titanfall y, sobre todo, Apex Legends. Tantas horas le he dedicado a este último durante estos últimos meses, que al poco de comenzar Borderlands 3 y ver la nueva mecánica de deslizamiento y trepar por los muros, es inevitable para mí no pensar en el citado battle royale. Unas mejoras al movimiento que hacen que moverse por las diferentes localizaciones sea más ágil y divertido que en anteriores entregas.
Por lo demás, como decimos, poca innovación. Una gran cantidad de armas y equipamiento que recoger, misiones en las que tendremos que avanzar eliminando enemigos hasta encontrarnos con el jefe final de turno. Esto no es necesariamente algo negativo, ya que los que queríamos más Borderlands tenemos lo que pedíamos, pero para aquellos que, tras tanto tiempo se esperaba algo más novedoso sí que puede pesar.
En el apartado técnico el juego es espectacular. El sonido, tanto su música, como doblaje y voces de los personajes están muy cuidados y se nota de sobra que Gearbox ha puesto empeño en que salga todo bien. Gráficamente el título sigue con su cel shading tan característico, pero llevado un poco más allá. Está claro que este tipo de gráficos no busca el realismo, pero sí se ha mejorado a nivel de detalle, colores y texturas para que, aun continuando con su estilo, se vea mejor que las anteriores entregas.
Esto se ve reflejado en los diferentes escenarios, esta vez divididos en una serie de planetas que visitaremos a lo largo de la aventura. Cada uno con su ambientación y temática que hace que se diferencien claramente entre ellos, pero todos con un acabado artístico brutal.
Conclusión
Podemos ver como Borderlands 3 es un gran juego, muy continuista, pero que consigue lo que se propone, mejorar los anteriores títulos de la saga. Tal vez no lo suficiente para algunos jugadores, pero para aquellos que quieren Borderlands pero en mayor cantidad; más horas, zonas más grandes y más armas y enemigos, el título cumple con creces, que, con la posibilidad de jugar con, hasta 3 amigos, hace que sea uno de los mejores títulos para jugar en este final de año.
Además, como viene siendo habitual, el estudio complementará el juego con varios DLCs que suelen ser igual, o mejores, que el propio título, por lo que aun queda Borderlands 3 para rato y, quizá, termine convenciendo a aquellos que aun tienen dudas acerca de esta última entrega de la saga.