En 2023 se lanzó el juego más ambicioso de Harry Potter hasta la fecha: Hogwarts Legacy. En este, se podía ir a clases, explorar los alrededores del castillo, usar las Maldiciones Imperdonables y encontrar lugares secretos llenos de magia y misterio. Pero había algo que no se podía hacer: jugar a Quidditch, una ausencia que no pasó desapercibida para ningún jugador y que nadie comprendió del todo. A lo mejor la existencia de Harry Potter: Campeones de Quidditch fue el motivo o, tal vez, la consecuencia, pero lo cierto es que, de la mano de Unbroken Studios, nos ha llegado un título preparado con mucho cariño, pero con pocos elementos para mantenerse por sí mismo.
Así es Campeones de Quidditch
Es indiscutible que Campeones de Quidditch ha sido elaborado bajo el manto del detallismo. Desde la elección de su estilo artístico hasta la gran cantidad de detalles visuales y sonoros con los que cuenta se percibe la intención de querer presentar una entrega con toda la esencia mágica de la saga. La humildad de su propuesta apenas se percibe en elementos como los diálogos por escrito o la falta de profundidad en algunos aspectos. Por el resto, la presentación es impecable, contando con voces en español como la de la propia Ginny Weasly, narradora en esta historia.
La presencia de Ginny en el eje de la historia no es casualidad. Mientras que en las películas apenas se tiene información sobre el trasfondo del personaje, las novelas dejan clara que Ginny es una gran jugadora de Quidditch, llegando incluso a dedicarse a ello de manera profesional en su vida adulta. Así, esta será el hilo conductor del juego, iniciando a nuestro personaje en el apasionante mundo del deporte mágico. Los primeros pasos en el juego serán mediante un tutorial donde aprender poco a poco el funcionamiento del deporte, pero también de cómo cambiar de personaje, las diferentes acciones de los integrantes del equipo, cómo parar goles, movernos, esquivar, etc. Si bien en un inicio parece complicado, si seguimos el tutorial acabaremos por controlar la dinámica del partido.
Tal y como los fan del mundo mágico sabrán, un equipo está formado por el cazador, encargado de marcar tantos, los golpeadores, defensas capaces de desviar las bludgers, el guardían o portero y el buscador, encargado de atrapar la snitch dorada. En esencia, podremos ir cambiando de posición en función de las necesidades del partido. Sin embargo, hay algunos cambios con respecto a lo que este deporte nos tiene acostumbrados. El más importante sería el valor de la snitch, la cual ha pasado a valer de 150 a 30 puntos. El siguiente cambio es que los partidos se terminan a los seis minutos, gana el que más puntos tenga, o al llegar a 100 puntos.
Ahora bien, hay cuatro modos de juego diferentes: campaña, multijugador, práctica y exhibición. Además, en el juego podemos encontrar algunos de los hitos más importantes en relación con el quidditch, como la Copa de las Casas o Los Mundiales de Quidditch. Es decir, el juego incluye todo lo que se esperaba de un juego de este deporte.
¿El problema? Te tiene que gustar mucho el quidditch para dedicarle varias horas al juego. Su premisa no deja de ser la que es, con una jugabilidad fija, que puede caer en lo monótono al poco tiempo. Es decir, los partidos son divertidos, los controles funcionan bien y, salvando la distancias, recuerdan un poco a esos enfrentamientos de blitzbol de Final Fantasy X, pero todo ello no parece suficiente para que el juego tenga un largo recorrido y ya son varias las voces que dicen que Campeones de Quidditch sería el DLC perfecto de Hogwarts Legacy.
Y lo cierto es que es una pena, ya que además encontramos muchos cosméticos y opciones de personalización conforme avanzamos, todo con dinero interno del juego. De hecho, un detalle bastante gracioso ha sido la implementación del meme de la cara de Hagrid como parte de esos coleccionables.
A los mandos, la experiencia se siente fluida, los partidos son rápidos y entretenidos y, sin ser gráficamente un portento, funciona tan bien como cabría esperar. Si tuviera que señalar un detalle que no me ha acabado de convencer, es el caos que se genera a la hora de localizar lo que está ocurriendo en el partido, aunque hay pocas maneras mejores de solventar la situación, así como algunos fallos de traducción.
Conclusiones de Campeones de Quidditch
Por lo tanto, es imposible decir que el juego no ofrece una experiencia entretenida, porque sí que lo hace. El problema que tiene está más enfocado hacia la implicación del jugador. No parece haber suficientes elementos para motivar al jugador a que continúe explorando todos sus entresijos. Si bien, decir que es un DLC de Hogwarts Legacy a lo mejor es exagerado, sí que habrá que esperar para ver cómo evoluciona y lo que consigue ofrecer.
