ANÁLISIS INDIANA JONES Y EL GRAN CÍRCULO PARA PC
No es momento ahora de hacer balance de 2024. Hoy os venimos a hablar de nuestro análisis de Indiana Jones y el Gran Círculo. Pero si que creo que, a modo de cierre de este año, estamos ante uno de los mejores juegos que se han podido lanzar en los últimos estertores de un año que, si bien a nivel de industria ha sido catastrófico, en lo jugable nos ha dejado bastantes alegrías. Y el broche de oro creo que es este nuevo juego de Indiana Jones, que viene para sorprender a aquellos que dudaba de la capacidad de Machine Games ante tamaña franquicia. Así que sin más dilación, vamos allá.
Lanzado el pasado 9 de diciembre, el juego nos ha ido dejando varios videos y tráileres en los que ya pudimos ir viendo por donde irían los tiros (y los latigazos). Empezando por lo primero, la historia del juego se desarrolla en 1937 y la línea de tiempo se sitúa entre la primera y la tercera película. Gracias a sus impresionantes secuencias iniciales, tendremos bien claro nuestro objetivo: recorrer el mundo por la ruta del Círculo Antiguo.
Todo ello después de que un misterioso robo en los museos del Marshall College le impulse a abandonar de nuevo la vida académica para embarcarse en una aventura alrededor del mundo, desde las majestuosas salas del Vaticano hasta las ruinas de Sukhothai, pasando por las resecas dunas de Giza y las heladas cumbres del Himalaya.
Además de la historia, que hace honor a las películas situándose a su altura, la escritura es genial y demuestra lo que ya muchos apreciábamos (pero no acababa de reflotar del todo) en los juegos recientes de Wolfenstein. Momentos épicos y muy cinematográficos, pero esta vez centrado en todo lo que tiene que ver con el mundo de Indiana Jones. Los fans de las películas reconocerán multitud de elementos icónicos y de referencias. Y a todo ello ayuda una recreación de los escenarios digna de un Oscar. Fielmente diseñados, te quedarás embobado aunque no quieras explorarlos. Cosa que si que deberás hacer y el juego te empuja a ello amablemente.
Entremos ya pues en lo que nos ofrece a nivel jugable el juego. En las semanas y meses previos al lanzamiento, quizás uno de los aspectos que más polémica generó fue que, a diferencia de lo esperado, el juego seria en primera persona. A pesar de haber momentos en los que la vista pasa a la tercera persona (como por ejemplo en las escaladas), el mayor peso se lo lleva una primera persona que desde Machine Games tienen más que trabajada.
Con esta perspectiva, la jugabilidad será la esperada en un juego en el que encarnamos a Indy: explorar lugares recónditos, aventurarnos en zonas de las que en muchas ocasiones deberemos escapar y, como no, hacer frente a los nazis que se interponen en nuestro camino.
No, esto no es un shooter. Aunque podremos usar ocasionalmente alguna arma de fuego, el juego apuesto más por una inmersión y realismo total, siendo mejor evitar a un enemigo (o deshacernos de él sigilosamente) que no enfrentarnos a él de modo directo. Las referencias a juegos como Dishonored están ahí, sin llegar seguramente a las cotas de excelencia del diseño de escenarios de Arkane, pero aquellos que disfrutaran con esa franquicia, deben saber que no les decepcionará.
A nivel de combate, el combate a melé gana peso en detrimento del combate con armas. Los encuentros que tengamos, en muchas ocasiones, se deberán resolver de esta manera. Sin duda, se trata de otro aspecto más que deja claro el realismo de todo lo que vemos y jugamos, intentando desde el estudio que nos sintamos Indiana Jones no sólo en lo visual sino en lo jugable.
Pero además de escabullirnos de enemigos, lo que también predominarán serán los puzles. A ver, somos Indy, que menos, no? Pues bien, estos puzles serán muy variados. El nivel de desafío, además de ser ajustable, es totalmente adecuado y orientado a la exploración de unos niveles que están muy bien diseñados y, en algunos de ellos, con una verticalidad muy bien creada. Si bien es cierto que en mi partida hubo algunos que se resolvieron un poco por “suerte” la mayoría de ellos tienen su explicación totalmente lógica y adecuada. Además están muy bien intrincados en la jugabilidad y la historia del título.
El mundo de Indiana Jones se siente enorme. Tendremos tres macroáreas muy diferentes y libremente explorables (Ciudad del Vaticano, Giza y Sukhothai). Peor a estas se les sumarán un par de incisiones más lineales nada desagradables. A excepción del primero, todos los disfraces de que dispone Jones deberán descubrirse explorando adecuadamente las zonas que visita, para facilitarle el acceso a las zonas guarnecidas por los nazis, reforzando así nueva mente la inmersión del juego.
Y no será una aventura corta. Completar sólo la historia principal del juego nos llevará entre 13 y 15 horas, pero hacer sólo esto sería quedarse en la superficie y desperdiciar buena parte de los atractivos del juego. Serán varios los objetivos y misiones secundarias que tendremos, además de beneficiarnos de puntos de mejora si encontramos varios objetos esparcidos por el escenario. Todo ello hace que lo más recomendable para disfrutar del juego en toda su dimensión sea hacer todo lo posible en el momento posible. Y como decía, no tenemos la sensación de “lista de la compra” de otros juegos. Todo se hace de forma muy amable y coherente.
En el apartado audiovisual, he de decir que el juego brilla con luz propia. Los escenarios se llevan el mayor protagonismo y realmente la labor de Machine Games de recrear con toda fidelidad lo que vemos en pantalla es encomiable. El uso del raytracing en PC ayuda a ese nivel de detalle espectacular que, insistimos, parece que estés dentro de una película.
En el apartado técnico, el funcionamiento ha sido correcto, pero advertimos que el juego ha sido jugado en un PC que cumple de manera sobrada incluso los requisitos recomendados, por lo que habría que ver que tal se comporta en ordenadores más modestos.
Así pues, y como conclusión, estamos ante uno de esos juegos que, si la lista de los GOTY se cerrara a 31 de diciembre, creemos que estaría más que nominado. Su total inmersión de los escenarios, la fidelidad al universo de las películas y el sentirte realmente Indiana Jones hacen de Indiana Jones y el Gran Círculo un juego de esos que hay que jugar sí o sí. Incluso si no has visto ninguna película o no sientes simpatía por este personaje, estamos ante un juego que son de aquellos en los que las horas pasan volando y no te das cuenta, al disfrutar tanto de una jugabilidad atrapante y como pocas.
PUNTOS FUERTES:
- Su fidelidad a las películas: te sientes Indiana Jones de verdad
- Su diseño de escenarios y lo que incentivan la exploración
- Visualmente es un espectáculo continuo
PUNTOS DÉBILES:
- Algún segmento menos inspirado, a modo de transición
- La IA de algún enemigo es algo mejorable
- Que no dure 20 horas más!
