Hace pocos días recibí un código para probar un juego, título al que ya le había echado el ojo cuando vi que salía en enero, así que lo cogí con mucha ilusión ya que soy una amante de los indies y si son originales más todavía. ¿Cuál fue mi sorpresa al empezar a jugar a Journey to the Savage Planet? Que estaba ante un juego que pintaba muy diferente a lo que he probado hasta ahora. Estad atentos a este análisis que os traigo para TuPlayStation sobre el título de Typhoon Studios y 505 Games, que salió a la venta en formato digital el 28 de Enero.
Empiezas a explorar y ya te encuentras los primeros alienígenas, algunos de ellos muy monos, tan monos que incluso te costará aniquilarlos. Puedes ir escaneando todo tu entorno para incorporar toda la información que puedas en nuestro banco de datos E.K.O, la inteligencia artificial que nos acompañará y asesorará en esta nueva aventura. Mi primer encuentro fue en el interior de una cueva, recogí un objeto que parecía inofensivo y me adentré, viendo al fondo algunos Globopájaros, una especie de mezcla entre un pollo morado y un cerdo, no sé muy bien cómo explicar ese animal que vi, le lancé el objeto antes mencionado y este se rompió esparciendo por el suelo su interior, ese animal fue a comérselo y acto seguido soltó fragmentos de carbono por sus partes traseras. Ahí ya empecé a ver que este juego no era tan normal como parecía.
El diseño de Journey to the Savage Planet es muy colorido, con una paleta de colores muy viva y a nivel artístico muy cuidado. El diseño de los alienígenas es sobretodo muy único y los paisajes te encandilan.
El movimiento es muy fluido, cada enemigo tiene una mecánica diferente con sus puntos débiles y nos encontraremos con algún puzzle que deberemos resolver para abrir puertas o abrirnos camino para poder seguir, también cuenta con partes de sigilo donde usaremos parte del escenario para escondernos y sorprender a los enemigos.
Son varios los videojuegos que han inspirado al equipo para crear Journey to the Savage Planet y es imposible no darse cuenta mientras juegas el título. Tiene mucho de metroidvania, pudiendo explorar el planeta extraterrestre con toda la libertad y necesitando ciertos elementos especiales y mejoras para nuestro traje y así avanzar a nuevas zonas más avanzadas. También tiene su toque de Dark Souls, y es que aunque Journey to the Savage Planet no sea un juego sombrío y oscuro vamos a morir y mucho, y no es que sea particularmente difícil, y habrá que ir a buscar los materiales recogidos desde la última visita a la nave al cadáver que estará situado donde morímos. La estética alienígena, las criaturas de gran personalidad y los escenarios llenos de colores nos recordarán a No Man’s Sky.
El humor está presente en gran parte del videojuego, tanto a través de los vídeos, diálogos, como en las situaciones que vayamos viviendo a lo largo de la aventura. Los movimientos graciosos de las plantas, el poder abofetear a las criaturas, darles patadas y que salgan disparadas o incluso darlas de comer a otras criaturas más grandes, los sonidos que iremos escuchando.
CONCLUSIÓN:
Estamos ante una obra muy original, que nos sacará más de una sonrisa y nos dará ratos muy divertidos, con una gran dirección artística y muy bien cuidada que nos hará disfrutar a los fans de las historias alienígenas con toques de humor, y dándonos un videojuego muy bonito visualmente hablando.