ANÁLISIS MOTOGP 24
Cuando nos enfrentamos al análisis de una entrega deportiva anual, siempre hemos de aclarar si esta nueva entrega merece la pena en comparación con la anterior y cuantas y cuan profundas son las novedades con relación al juego del año pasado. Como suele ocurrir por estas fechas, ya tenemos una nueva entrega de la mejor competición de Motos que existe, MotoGP. Desde el pasado día 2 de abril y una vez ya iniciado el campeonato de manera oficial, tenemos disponible MotoGP 24 en PC y consolas de actual generación, que se resiste a dejar de lado la antigua generación y también sale en Xbox One y PS4. Veamos que tal las novedades de este año.
Son varios los aspectos que se nos han ido anunciando previamente como novedades de este año. Pero antes de entrar en ellas, dejadme presentar a nivel jugable la oferta de modos que tenemos disponible en esta nueva entrega.
A forjarte una trayectoria
Empezamos por el que, a mi modo de ver, es el modo principal de la propuesta jugable de MotoGP 24, el modo Trayectoria. Al igual que en años anteriores, deberemos crear un piloto de 0 y empezar por lo más bajo del mundo de MotoGP. Nos dejarán participar en las últimas carreras de un campeonato de Moto 3 y eso servirá para, después, iniciar realmente nuestra carrera.
Después del mismo menú de personalización que en años pasados, podremos salir de boxes y lanzarnos, poco a poco, a intentar ascender de categoría para intentar proclamarnos campeones del mundo de MotoGP, tarea que ya os adelantamos no será nada fácil.
En este modo ya descubrimos (y empezamos ya con las novedades) nuevas mecánicas añadidas, como los movimientos del mercado de pilotos. Como sucede en la vida real, al final de cada temporada podremos cambiar de equipo y de moto. Eso si, no siempre será el que nosotros queramos ya que nuestras ofertas/peticiones irán en base a nuestro desempeño en la pista. Si a lo largo de los grandes premios hemos ido cumpliendo los objetivos que tanto a nivel de piloto como de equipo se nos han ido pidiendo, podremos optar a mejores motos y mejores puestos. En cambio, si no damos con la tecla, podríamos incluso hasta descender de categoría.
Todo esto le añade ese extra jugable que no teníamos el año anterior, incrementado, además, por lo que llaman “el Muro”, que no deja de ser una red social ficticia en la que poder reaccionar y contestar a declaraciones de otros pilotos, provocando ello incluso una posible enemistad que se verá reflejada en la pista, siendo esos pilotos más agresivos si te tienen a tiro (damos fe de que ha sido así).
Varios modos variados con alguna novedad y otros habituales
Los demás modos de juego que repiten y que suelen ser un clásico ya son las opciones para disputar un campeonato o tan sólo un Gran Premio, además de los clásicos modos multijugador (online o a pantalla partida).
Antes de lanzarnos a la pista, os recomendamos que iniciéis también el modo MotoGP Academy, una suerte de “autoescuela” en el que irá de fábula para tener el primer contacto con los circuitos. De manera similar a lo que ocurre con Gran Turismo 7, tendremos una explicación o tutorial de cada circuito y de cada uno de sus cuatro sectores, dándonos pistas y ayudas para explicarnos la mejor manera de tomar esa trazada.
También destaca el LiveGP, un modo online donde competirás contra otros jugadores de tu mismo nivel en carreras que cambian cada semana.
Una vez descrito el “menú” que nos propone el juego, entremos de lleno en las sensaciones una vez estás en tu moto. Y empiezo con otra de las novedades anunciadas, la IA adaptativa. Según lo comentado en los días previos al lanzamiento, el juego iba a ser más “listo” que la entrega anterior y el comportamiento de los demás pilotos iría en función a nuestro propio comportamiento en las pistas.
En la pista se acordarán de ti
Es altamente conocido que la agresividad de los demás pilotos controlados por la máquina es alta y en muchas ocasiones te tiraban a la más mínima, siendo una experiencia algo injusta incluso. En la edición de este año, si que creo que la IA sigue siendo bastante agresiva, pero he de reconocer que está algo más afinada. Se nota que ahora son algo más conscientes de tu presencia y, aunque “irán a saco”, no será tan fácil que te manden a la gravilla. Además, también veremos cómo, de tanto en cuando, ellos también sufren con tu presión y el acecho curva tras curva puede desencadenar en un fallo del oponente que deberás aprovechar si quieres adelantar.
Las sensaciones jugables encima de la moto cambian mucho entre Moto3 y las demás categorías. Si bien en la categoría inferior se siente mucho más manejable y dominable, el salto a las demás categorías se “sufrirá” y requerirá un extra de aprendizaje para sentirnos del todo cómodos. Pero, como siempre, la personalización en el nivel de ayudas (tanto a nivel de moto, pista, etc), hará que podamos configurar nuestra experiencia a nuestro gusto, e ir modificándola conforme vayamos asumiendo determinados conceptos y conforme tengamos más práctica.
En definitiva, a nivel jugable se agradecen los pequeños cambios introducidos y las novedades de este año. No es ninguna revolución en la saga pero es un peldaño más en la evolución hacia el juego perfecto de motos para el que ya le queda poco para serlo. Los cambios de este 23 a 24 son más grandes e importantes que lo que hubo del 22 al 23. Y lo más importante es que jugablemente se notan mucho esos cambios, dejando de lado esa sensación que a veces nos ha dado esta saga de ser un copia y pega año tras año.
Aspecto técnico y visual
Para acabar, en cuanto al rendimiento técnico y al aparatado audiovisual, he de decir que también se sube un peldaño más. Sin ser una gran revolución, se nota que poco a poco van sacando más provecho a las tecnologías de la actual generación. Aunque las similitudes con la entrega del año pasado están ahí, se nota algo de trabajo sobretodo en lo relativo a los modelados en el circuito y el acabado tanto de los pilotos como de las motos.
En la versión jugada, PlayStation 5, hemos disfrutado mucho con los DualSense, ya que los gatillos hápticos nos han encantado como han respondido, siendo muy sensible para las salidas de las curvas y teniendo que abrir gas poco a poco y de manera muy suave si no nos queremos ir al suelo. Y a nivel visual el juego luce realmente bien sin tener ningún tipo de fallo gráfico o bajones en los frames.
Conclusiones
A modo de conclusión, estamos ante la mejor entrega de MotoGP hasta la fecha. Si bien, como cada año, no estamos ante una revolución ni jugable ni técnica, las novedades de este año (especialmente la IA adaptativa y el mercado de fichajes) le sientan de fábula y gustarán a los fans del deporte de las dos ruedas. Hemos echado de menos una mayor calidad gráfica y un cambio en ciertos aspectos que se repiten año tras año, pero he de decir que tengo juego para rato y que disfrutaré aún más que lo que disfruté con MotoGP 23.
