Como en varios juegos de este mismo género, simulación de granjas, los jugadores encarnaremos a un joven que ha heredado la granja del abuelo de la que ahora nos deberemos ocupar para sacarnos un dinerillo extra, y poder «casarnos» en un futuro. Con un estilo gráfico bastante animado los jugadores tendrán la oportunidad de personalizar su personaje entre varias opciones, aunque algo escasas, siendo un aspecto secundario de la aventura pero de la que podían haberse introducido más opciones para que funcione correctamente.
Como todo en la vida los comienzos son duros y en una granja parece que eso se multiplica exponencialmente. Aunque tenemos la oportunidad de comenzar con algo de dinero… a nosotros nos gusta la experiencia más realista y nos hemos animado en el análisis a levantarnos a las 6 de la mañana para empezar a labrar los campos. Para ello poco a poco se nos van explicando las novedades que presenta Mineral Town y dónde encontraremos los primeros utensilios para poder trabajar los campos. Todo esto teniendo en cuenta que los jugadores contaremos con una resistencia reducida y en la que deberemos aprender a realizar las inversiones de la manera más eficaz para cumplir nuestro objetivo. Por suerte para los jugadores tendremos a nuestra disposición varios baúles en la granja dónde podremos introducir nuestros productos que queremos comercializar para que se vendan automáticamente. Esto nos ahorrará algo de tiempo y nos permitirá dedicarnos a otras labores.
En relación a la agricultura debemos aprender a cultivar nuestros productos teniendo en cuenta diversas condiciones para ello. Por ejemplo habrá productos que necesitan cuidados especiales o que solo sean compatibles en ciertas estaciones. Por lo que los jugadores deberemos tener cuidado con todo ello si queremos «sobrevivir» un día más. En relación a los animales deberemos tener cuidado de que el forraje no falte y que se sientan queridos. Pero si queremos despejarnos un poco tenemos una fuente termal para descansar y recuperar energía además de la pesca para poder distraernos… pero si somos amantes de la aventura siempre podremos ir a la cueva para obtener minerales y acceder a los niveles más bajos del lugar. Una labor que solo es apta para los mejores jugadores de Story Of Seasons y que amen la rutina del día al día en la granja. Por suerte para los jugadores tendremos días de descanso en los que el pueblo celebra celebra ciertos festivales que nos benefician con ciertos minijuegos para romper la rutina como puede ser la carrera de caballos.
Si nos centramos en el componente social del juego debemos destacar la simplicidad de este apartado pero que nos permite que sea algo dinámico en nuestras opciones. Esto quiere decir que durante la partida podremos elegir a nuestra pareja independientemente de su orientación sexual siempre que mejoremos las relaciones con ellos. En relación a este aspecto social también debemos regirnos a un problema que hemos observado durante el análisis y es el poco tiempo de actividad que tiene el pueblo. Más concretamente hacemos mención a las tiendas puesto que abren tarde y cierra pronto provocando que tengamos que posponer nuestros negocios si hemos realizado otras labores. Esto no sería un problema si no diera esa sensación de rapidez tan acentuada que parece tener el juego en todo momento como nos ha mostrado en el análisis.
Conclusión
La verdad es que Story Of Seasons: Friends Of Mineral Town es una aventura muy entretenida que termina siendo repetitiva al cabo del tiempo por su propia mecánica jugable, pero es que estamos ante un simulador de gestión de granjas. Durante el análisis debemos reconocer que también han habido momentos en los que hemos dicho un día solo y nos hemos tirado una semana del juego hasta cumplir con nuestra meta a corto plazo. Para los más peques de la casa puede ser un gran título y si buscáis algo «diferente» a juegos como Animal Crossing, salvando las distancias, puede ser también una opción entretenida. Como aliciente… el juego cuenta con un apartado gráfico hermoso, un apartado sonoro agradable y viene traducido completamente al castellano.