ANÁLISIS TRUE VIRUS PARA XBOX SERIES X
Cada vez que juego a una aventura point’n’click tengo la sensación de aquella defensa numantina de un género en el que los años pasan y la sociedad avanza. A pesar de tener propuestas elaboradas que añaden toques interesantes a esta ya clásica fórmula, por contra, suele haber propuestas que siguen ancladas en el pasado y que se aferran a él pensando que cualquier tiempo pasado fue mejor. Seguidme en este análisis para ver en que lado de la balanza se sitúa True Virus.
HISTORIA
Aunque uno de los puntos fuertes de una aventura point’n’click suele ser su historia, he de decir que en el caso de la obra de Farmind Studio y 100 GAMES tiene un inicio prometedor que no acaba colmándose a lo largo de las 5 o 6 horas que te puede durar.
La historia se sitúa en un pequeño pueblo europeo en el que somos un personaje que se despierta sin saber como ni porqué en un hospital psiquiátrico. Además de plantearnos porqué hemos acabado ahí, vemos como un virus ha afectado a toda la población convirtiéndola en zombi.
Con el propósito de, por un lado, escapar de ahí y, por otro, intentar saber que es lo que ha causado tamaña desgracia mundial, deberemos resolver, como es ya un clásico en el género, puzles y rompecabezas para lograr nuestro objetivo.
Sin querer spoilear nada, si que he de decir que la historia no es uno de sus puntos fuertes y que, unido al hecho de no empatizar nada con el personaje que manejamos (no se hace ningún esfuerzo en romper esa 4ª pared), hace que asistamos a un argumento que pasará sin pena ni gloria y que muy probablemente hayas olvidado a las pocas semanas de acabar el juego.
JUGABILIDAD
A poco que hayas jugado a alguna aventura gráfica (point’n’click) ya sabrás lo que te vas a encontrar aquí. Deberemos escudriñar cada pixel del escenario para dar con la clave que nos permita avanzar. Bien sea encontrando donde utilizar ese objeto que llevo en el inventario, encontrar otro que me sirva en otro lado o combinando varios de ellos para poder resolver ese acertijo que afrontamos.
He de decir que se echa en falta algún tipo de indicación en cuanto a lo que hay que hacer o algún tipo de registro de misiones. Aunque siempre tendrás algo nuevo por intentar, esa falta de guía hará que recurras demasiado al manido mecanismo de ensayo error para dar con la solución. Además, si eres de los menos avezados en dicho género y agradeces mucho el botón «hotspot» (aquel que mediante un solo botón podrás ver todos los puntos de interés del escenario), te recomiendo altas dosis de paciencia ya que carecemos de ayuda de ningún tipo.
Es por ello que la jugabilidad se siente algo arcaica y abrupta, donde te lanzan a una serie de escenarios por los que deambularás intentando lograr la combinación perfecta por pura casualidad. Esto se hace más latente en el tramo final del juego donde la dificultad es aún más enrevesada y sus puzles más difíciles.
En definitiva, una jugabilidad quizás demasiado clásica en la que se echa en falta algo más de acompañamiento (que no menor dificultad).
GRÁFICOS Y RENDIMIENTO
Como podéis ver y como suele ser en todo este tipo de juegos, el rendimiento no será un problema y la versión que hemos jugado (Xbox Series X) funcionará perfectamente. Además durante toda nuestra partida no hemos tenido ningún bug ni glitch gráfico.
Su estilo artístico de «dibujo animado» de los años 70 sirve para esa ambientación horrífica. Visualmente cumple su cometido y su ambientación cuadra con lo visto en pantalla, pero se echa también de menos alguna animación más, pensando en todo aquel terror que podría aportar.
CONCLUSIONES
True Virus no deja de ser café para los muy cafeteros dentro de las aventuras point’n’click por lo áspero de su jugabilidad y lo algo arcaico de su propuesta. No es un juego malo pero no será la primera aventura gráfica que recomiende dentro de las lanzadas este 2023. Pero si te gusta devorar todo lo que sale de este género, quizás esta propuesta sea de las del fondo del barril y te sepa a poco
PUNTOS POSITIVOS
- Ambientación
- Estilo gráfico
PUNTOS NEGATIVOS
- Falta de acompañamiento en la jugabilidad
- Excesiva dificultad en el tramo final
