Análisis de Turbo Golf Racing
Seguro que muchos de vosotros, lectores y amigos, tenéis vuestra zona de comfort en los videojuegos. Cada género existente tiene una función y un grupo de nicho y, de ese nicho, nace un reducido grupo de personas con las que cuesta recomendar casi cualquier tipo de juegos. Aunque por la edad y por «el hobby» tengo la ligera destreza en cada uno de los géneros, debo reconocer que los juegos de deporte, de carrera y de estrategia en tiempo real me reproducen un rechazo casi absoluto. Turbo Golf Racing es una combinación de los dos nombrados… y que ha superado mi rechazo casi inicial.
Es decir, todo lo visto de él desde que se anunció me llamaba cero. Casi hasta tal punto de recurrir a una frase en la que, francamente, creo que es un absoluto engaño: «Se parece a Rocket League». Aunque el diseño recuerde al título de Psyonix; el concepto y la base son mucho más simple; hasta tal punto de recordar en algunos momentos a Trackmania o Mario Kart. Es arcade, pero con ideas de ser un juego competitivo mucho más que interesante.Centrémonos en su contenido. Turbo Golf Racing, en estos momentos, está en Acceso Anticipado. Eso quiere decir que todavía falta por ver el grueso del título, a pesar de que llega acompañado de diferentes modos de juego; uno dedicado al jugador solitario que servirá como tutorial para el plato fuerte: el multijugador.
Nuestro objetivo es conducir -esa broma os la regalo- una pelota durante un escenario hasta la meta o el hoyo; como si fuera un partido de Golf. Los escenarios; variados y coloridos, tendrán diferentes obstáculos o «ayudas» en forma de sprint para el coche y la pelotita. Además, en el modo multijugador, podremos usar diferentes objetos que encontraremos por el recorrido; dotándonos una ventaja si se usa correctamente.Aquí es donde puede fallar un poco Turbo Golf Racing y no creo que su jugabilidad pueda cambiar de aquí a su lanzamiento final. El control, simple y agradable, puede marear un poco si lo combinamos con la cámara fija -hacia la pelota- y si no sabemos maniobrar bien al coche. Podremos planear; dar un turbo e incluso empujar bruscamente a la pelota… pero a veces parece tan innecesario que sentiremos que hemos perdido el tiempo en más de una ocasión.
Hay temas que quedan opacados; el sonido e incluso la personalización jugable. La música y toda la parte sonora cumple sin más, supongamos que en el futuro incluirán más canciones. Puedes organizar todo el control y manejo del coche para más accesibilidad, aunque ésto no «ayudará» a lo comentado en el párrafo anterior.El apartado técnico, sin ser nada del otro mundo, cumple con creces pero algunas texturas parecen ancladas a un par de generaciones atrás. Tal vez, cuando salga del Acceso Anticipado, veamos algo más de trabajo y de detalle aunque, como ya decimos, en estos casos no es algo importante y con lo visto pues basta y sobra.
Turbo Golf Racing tiene recorrido. Es ágil; con un tono arcade de antaño y tiene lo que mucho de los juegos actuales echamos en falta: alma de jugador. El simple hecho de iniciar la aplicación; meterte en el lobby y pasar un buen rato jugando hace que solamente podamos recomendarlo si os mola probar algo nuevo. Ideal para el verano incluso.Salir de la zona de comfort es bastante complicado pero títulos como el de Hugecalf Studios son los que pueden ayudar picar el gusanillo. También decir que, al salir también en Xbox Game Pass, ayudará a que muchos usuarios les de por probar Turbo Golf Racing. Que nunca decaiga lo arcade.