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Análisis de Untitled Goose Game

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House House, un pequeño estudio independiente, se ha encargado de darle vidilla a una aventura que no necesita más que un ganso, un par de objetos y sobre todo: gente a la que molestar para coronarse en el mundo de los indies. Aún recuerdo cuando soñaba con tener Untitled Goose Game en las manos de manera física y poder jugarlo en Playstation 4, y así ha podido cumplirse gracias a Meridiem Games que se ha encargado de traer al animal más gamberro y a la vez tan adorable a esta plataforma.

Sencillo pero único

No os podemos hablar de unas plataformas o una jugabilidad increíble, básicamente porque no existen, pero si que os podemos contar que este juego consigue lo que muchos no pueden: entretener y sacarte una sonrisa desde que pillas el mando hasta que lo sueltas. Untitled Goose demuestra que no hace falta mucho para hacer un juego inolvidable, es una obra cómica con sus momentos de puzle y de sigilo que existe para molestar a los demás. El solo movimiento de nuestro protagonista ya es un acertado, el poder graznar para molestar a la gente, agacharnos, robar objetos, accionar interruptores o el simple el sonido de sus patitas al rozar el suelo ýa indica que una simple acción básica nos van a dar horas de diversión.
Untitled Goose Game
La gracia de este juego es completar tareas, como si fuéramos a comprar pero en vez de centrarnos en buscar el pan pues la misión es molestar a la señora que está haciendo la cola en el supermercado. Algunas de las misiones parecen fáciles pero hay otras que os prometo, me he llevado casi 40 minutos dando vueltas y graznando a lo loco porque me desesperaba para completarla (el nivel de satisfacción personal también se ve incrementado cuando descubres la pieza que te faltaba). Podemos hacer muchas cosas como robar, romper cosas, asustar los vecinos para que se escondan en algún lugar y poder seguir haciendo el ganso, esconder objetos de las propias manos, del suelo, de sitios escondidos…
Cada escenario, aunque pequeño, tiene un sinfín de posibilidades y no sigue ningún orden por lo que la puedes liar bien gansa. Todo esta loca aventura se puede pasar perfectamente en dos horas pero una vez te lo pases vas a tener ganas de volver otra vez sobre todo por su apartado técnico que es una delicia. Texturas plantas, tonos simples pero perfectamente colocados para atraer a todos los público junto con su banda sonora con música de Dan Golding, adaptada de Préludes de Claude Debussy.
No podíamos irnos sin mencionar que no haremos el ganso solo, en Untitled Goose Game ahora también tenemos disponible un modo multijugador local para que otro colega se venga a liarla tan parda como nosotros y provocar el caos a todos los vecinos del pueblo, sin duda un añadido que alarga la vida de este corto pero divertido título.

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