ANÁLISIS DEAD ISLAND 2
Originalmente fue anunciado para la generación pasada de consolas, pero cuando volvió a ser mostrado al público, se supo que también llegará a la actual. Hablamos de Dead Island 2, un título que al igual que su primera entrega, ha contado un desarrollo de más de una década.
En NextGame ya lo hemos probado en profundidad, y consideramos que no es para menos, pues estamos ante uno de los mejores títulos con temática zombies que hemos visto jamás.
Y es que no es lo único, pues a nivel artístico y de detalle no tiene competidor. Aunque esto es adelantar acontecimientos, y es que cuando vuelves del apocalipsis zombie en Hollywood, todo te parece un peligro.
Sol, playa, mucha viña de pijo y visceras es solo el comienzo de lo que hemos visto en Dead Island 2. Así que os aconsejamos que leáis nuestro análisis al completo, porque estamos ante uno de los título del año.
Repitiendo patrón de inmunidad
Al igual que en la primera entrega, nos pondremos en la piel de un personaje que sin comerlo ni beberlo se encuentra en mitad del apocalipsis zombi. Y es que para mayor sorpresa, descubre que es inmune al virus que está convirtiendo a la población en muertos vivientes y decide que un poder así, hay que aprovecharlo.
Ya sea para hacer de recadero a la población rica de los Ángeles, o para impedir que el virus se propague, tendremos que arriesgar nuestra vida y enfrentarnos a toda una odisea donde nos espera más de una sorpresa.
Nuevamente estamos ante una aventura que ronda las 20 horas de duración -aunque nosotros calculamos que hemos tardado algo menos-. Aunque esto es bastante subjetivo teniendo en cuenta la cantidad de misiones secundarias y otras tareas que tiene.
De hecho, pese a que no cuenta con una ambientación completa de mundo abierto, sus escenarios están muy bien conectados. Y decimos esto porque lo más lógico es que nos perdamos por el camino a una misión completando otra tarea que nos encontremos.
Igualmente, tanto en la aventura principal como en las subtareas nos hemos divertido mucho, encontrando situaciones únicas en ambos sentidos y muy entretenidos, aunque de esto hablaremos más adelante.
Más personajes, más posibilidades y más diversión
A diferencia de lo visto en el pasado, estamos el plantel de posibles protagonistas se extiende hasta los seis. Nuevamente, cada uno cuenta con habilidades únicas y características que los diferencia del resto, adaptándose a las preferencias de cada uno.
En primer lugar, hay que recordar que estamos ante un título con tintes de RPG, que aunque base parte de su jugabilidad en la acción y el gore, el rol también es sumamente importante.
Como hemos dicho, cada personaje cuenta con parámetros distintos: vitalidad, resistencia, fuerza, rapidez. Pero no solo eso, sino que además también hay habilidades únicas para cada uno; algunas iniciales y otras que se desbloquean a medida que subimos de nivel (como en todo buen RPG).
Por ejemplo, nuestra atleta, Amy, está especializada en ataques cuerpo a cuerpo y como tal tiene un abanico de habilidades centradas en esto que otros personajes no poseen, aunque entraremos más en detalles cuando hablemos de las cartas.
Por otra parte, la personalidad, aptitud y circunstancia de cada personaje se ve muy reflejada en su trascurso durante la trama. Las frases, respuestas y animaciones son muy diferentes en cada uno de los seis, casi tanto que parece que de uno a otro estamos en aventuras distintas (aunque no afecte a la trama).
Aquí ya debemos remarcar la primera gran diferencia respecto al primer Dead Island, y es que los personajes intervienen mucho más en la trama, y al tener personalidades y motivaciones tan distintas, se recalcan mucho más.
En definitiva, esto apuesta mucho más por la rejugabilidad, pero también potencia el juego cooperativo, ya que algunas jugabilidades -personajes- se compaginan mejor que otras.
En solitario o acompañado, en Dead Island 2 no te aburres nunca
Y aunque el juego se puede disfrutar en solitario a la perfección -no hay hay inclusión forzada del cooperativo en absoluto-, más siempre es mejor. Nosotros hemos jugado al juego varios días antes de su lanzamiento, y como tal nos ha costado bastante encontrar jugadores para probarlo.
Pero los ratitos que hemos podido disfrutarlo, hemos sacado conclusiones muy favorables del juego. Como una buena comunicación con el servidor así como la omisión absoluta de problemas de caídas.
Eso sí, hay un defecto imperdonable para el momento de la industria en el que nos encontramos, y es el hecho de que no cuenta con juego cruzado entre plataformas de distintas compañías.
Dicho de otro modo, aunque los usuarios de PlayStation 4 y PlayStation 5 podrán conectarse entre sí -igualmente ocurre con los de Xbox One y Series- no podrán hacerlo con la consola rival o con PC.
Lógicamente, esto nos factura a la hora de conectar con nuestros amigos de otras consolas, o incluso a la hora de buscar jugadores en momentos del día que haya pocos conectados.
Hemos destripado a los zombies, y ahora te destripamos la jugabilidad
Dead Island 2 nos ha parecido un juego tremendamente divertido por una razón muy justificada, y no se trata de su multijugador -no aporta nada nuevo pese a ser uno de sus platos fuertes-. Es por su jugabilidad; divertida, adictiva, invitando a la exploración y muy entretenido.
Empezando por lo más básico, el sistema de armas ha mejorado a su predecesor. Casi cualquier cosa que tenga filo puede ser usado como cortador de carne putrefacta. Esto invita a la exploración de una forma gratificante, pues al margen de que se gastan y rompen, siempre nos quedamos con ganas de ver como destroza los cuerpos a los no-muertos.
Los zombis son muy diversos en esta ocasión, y cada uno tiene debilidades y resistencias, por lo que tendremos que ser ágil con el cambio de arma para adaptarnos a cada situación. Para ello contamos con un menú radial que nos permite cambiar de arma de una forma cómoda, como era de esperar en esta clase de situaciones.
Pero por otra parte, casi cualquier arma puede ser modificada en esta entrega, de tal modo que podemos disfrutar de nuestras propias creaciones ya sea aumentándoles la fuerza o añadiéndole algún efecto, como la electrificación.
Esto suma un sin fin de posibilidades distintas a los combates pues la variedad es enorme, y el efecto en los zombis es muy visual lo que invita a probar cosas nuevas.
Por supuesto más avanzados en la aventura, también desbloquearemos armas de fuego, las cuales también son modificables. Dead Island no es un juego de terror al caso, pero si un survival, y cambiar de armas y explorar al máximo son pilares básicos en él y han sabido hacerlo muy gratificante.
A esto hay que sumarle las habilidades de cada personaje, que añade más efectos y posibilidades al combate, como la posibilidad de encadenar un salto con una patada, por poner un ejemplo de los muchos que hay.
Las cartas son un interesante añadido, que no llega a conquistarnos
Por último, hay que tener en cuenta la variedad de situaciones que añade el sistema de cartas, uno de sus principales añadidos. Cada personaje tiene un abanico de estos naipes predefinido como propio, y ya sea mediante la exploración o la exterminación debemos hacernos con ellas.
Estas, nos proporcionarán no solo habilidades nuevas, sino también algunas pasivas que mejorar algunos aspectos del combate, así como aportar bonificaciones nuevas si cumplimos ciertas condiciones.
Dicho de otro modo, si la exploración ya era un pilar importante de esta entrega, ahora es aún más valioso. Así como realizar tareas secundarias para subir de nivel, ya que esto nos permite conseguir otras nuevas y desbloquear espacios para poder equiparlas.
Ciertamente es un añadido interesante, que da más variedad a la vertiente rolera del juego así como una mayor situaciones de tácticas ya sea en solitario como en cooperativo. Pero más allá de ello y con su parecido a lo visto en Back 4 Blood, no es que sea la revolución del género.
Aún así, se agradece su incursión y todo lo que proporciona de un modo indirecto, logrando que el juego sea mucho más completo.
Gráficos de infarto y desatando el potencial de la actual generación de consolas
Dead Island 2 no solo es un juego muy divertido, también es todo un portento gráfico por muchos motivos. Si bien es cierto cuenta con algunos diseños un tanto mejorables (sobre todo animaciones faciales) destaca por un cuidado nivel de detalle.
En especial en los decorados, donde hemos visto un gran y variado volumen de objetos distintos con los que interaccionar. Así como las partes destructibles del escenario, que nos permite incluso desbloquear atajos.
Por otra parte, nos ha impresionado lo bien conectados que están sus mapas -y muy variados- no estamos ante un juego de mundo abierto y ni falta que le hace. Sino que en su lugar tenemos fases bien cohesionado y además grandes, con zonas para explorar y conseguir coleccionables.
También cuenta con una iluminación muy elevada que permite planos excepcionales de la ciudad de las estrellas, lo cual luce mucho mejor gracias a los 60 fotogramas por segundo tan estables que logra en la sobremesa de Sony (donde hemos hecho el análisis). Aunque como ya es habitual, podemos elegir entre varios modos gráficos.
La ambientación también se ve muy beneficiada por el sonido 3D, que consigue una atmósfera más absorbente, al igual que la vibración háptica que nos permite sentir cada paso del personaje.
No queríamos terminar esta sección, sin mencionar que los fans de la saga encontrarán varias caras merecidas de entregas anteriores, lo que explica que el universo del juego está creciendo y hay todo un lore alrededor del mismo.
Conclusiones finales | Análisis Dead Island 2
Ha costado, ha llevado muchos años, pero Dead Island 2 ya está aquí y es todo lo que esperábamos y más. Un buen survival que aprovecha como pocos la posibilidad de la exploración, un cooperativo divertido sin revolucionar el género y un abanico abierto de posibilidades jugables.
Nos ha parecido un juego muy completo en todos los campos que intenta abarcar, y si bien es cierto, no es perfecto en todos ello, los chicos de Dambuster Studios han demostrado que saben ponerle ganas y mimo en todo lo que hacen.
Lo que más nos ha gustado:
- Lo divertido y gratificante que resulta.
- Mejora a su predecesor en todos los aspectos.
- Gráficamente es espectacular y tiene animaciones muy curradas.
Lo que menos nos ha gustado:
- Que no tenga juego cruzado pesa en plenos 2023.
- Algún bug o textura no tan trabajada.
- El sistema de cartas nos ha gustado, pero no está tan explotado como quisiéramos.