HORROR BAJO PRESIÓN
Analizar un juego de terror siempre es algo difícil puesto que es uno de los géneros más subjetivos que hay: lo que a uno le puede dar mucho miedo, a otro puede que ni le haga inmutarse. Si que vaya por delante que algún que otro “jumpscare” tendremos.
Y, como dice el título, estamos ante un cuento de Horror.
Pongamos en contexto que la versión analizada se trata de la versión de PS5 de un juego que se lanzó en julio del año pasado en PC. Esta versión para la consola de Sony se lanzó el día 28 de enero.
Se trata del inicio de una pretendida trilogía. Su creador, Carlos Coronado, ya tiene planificados 2 títulos más (The Beggar y The Astronaut).
Esta primera entrega se sitúa en un escenario mediterráneo (de hecho, podemos ver una parte de los escenarios MUY inspirada en Gerona) y nosotros encarnaremos a Martí Vermelló (nombre y apellido catalán, otro indicio más) que se ha desplazado a esta isla para intentar dar con la cura para sus seres queridos. El personaje, por eso, no interactúa ya que ni sabemos lo que piensa en ningún momento ni le oímos hablar en todo el juego. En parte normal al estar “solo” en la isla, pero a algún jugador le hubiera transmitido más si pudiéramos conocer alguno de sus pensamientos al respecto de lo que va descubriendo.
VIVA EL VINO!
El subtítulo “The Wine” viene por lo siguiente: el secreto parece ser encontrar la única botella de vino que se producía en esa isla que aún no ha sido abierta, para poder frenar la pandemia (llamada Fiebre de los Diablos) que ha asolado a toda la población.
Por ello, nuestra aventura empieza al desembarcar en el nuevo territorio y empezar a explorar, con la intención de llegar a las bodegas donde se fabricaba dicho vino.
Este argumento se plantea interesante y el juego nos va ampliando la información y los sucesos relacionados a lo largo de recortes de papel escritos por los (en su día) habitantes de la isla así como recortes de prensa que encontramos. La información recibida es justa y correcta (ni nos cuentan “un rollo” ni son telegramas).
A partir pues de esos primeros compases deberemos explorar la isla y resolver algún que otro puzle para poder avanzar en nuestro camino, así como alguna sección corta de plataformas muy básica.
PUZLES PARA REPETIR
Y aquí analizamos los puzles. Realmente son solo 2 o 3 que se repiten a lo largo de las 3 horas que dura el juego (2 horas si eres muy habilidoso y no te paras mucho o 4 horas si se te da un poco peor o te gusta contemplar la belleza de los escenarios).
Estos puzles no inventan la rueda y los hemos visto en multitud de títulos (palancas, códigos en interruptores…) Pero quizás la novedad aquí es que muchos de ellos los tendremos que resolver bajo la tensión provocada por la constante persecución de un ser/ente que quiere acabar con nosotros. Si nos atrapa, en un par o tres de “toques” estaremos muertos. Añadimos que, como suele pasar, si “esprintamos” durante cierto tiempo, el personaje se cansa y casi no puede ni desplazarse durante ciertos segundos.
Precisamente será este punto diferenciador el que haga que muchos odien o amen este juego ya que para unos será un reto entretenido pero para otros será un dolor de cabeza…
En mi caso, lo he encontrado entretenido y más o menos diferente, pero en la parte final más bien era lo contrario puesto que el efecto repetición y encontrar cada vez puzles mas largos producía un efecto negativo.
El tratamiento de los puzles puede ser, como he dicho, negativo o positivo dependiendo del tipo de jugador. Pero lo que no admite discusión es el pésimo trato que se le da al sistema de guardado.
EL AUTOGUARDADO MÁS SIGILOSO
Para empezar, no podemos guardar el juego de manera manual. Aunque es automático, no sabemos nunca cuando el juego guarda su progreso ya que no recibimos ninguna notificación al respecto. Lo podemos intuir: cuando resolvemos un puzle, cuando llegamos a una zona concreta, etc. Pero nos gustaría tener esa certeza puesto que en mi caso me ha tocado rejugar más de 20 minutos en alguna ocasión.
El propio juego, desde el menú inicial, nos deja “continuar” la partida o elegir capítulo. Que esto me sirvió de “parche” en una ocasión ya que, a pesar de haber avanzado lo suficiente y “pasarme” el capítulo, el juego si morías te dejaba mucho más atrás.
En cuanto al aspecto gráfico, nada que reprochar. Todo luce bastante bien y el rendimiento (como es lógico al ser un juego que no pide muchos recursos) es muy bueno.
El uso del Dualsense no es para nada espectacular, vibrando de manera normal al agacharnos o caer desde cierta altura, por ejemplo. Otro aspecto a pulir es, cuando al inicio te “enseñan” los controles, que la adaptación a PS5 te indican que el “botón equis” (literal) es para saltar, en lugar de, almenos, poner el icono del botón en cuestión…
PUNTOS POSITIVOS
- La ambientación y los escenarios
- La historia y como se va contando
- El rendimiento
PUNTOS NEGATIVOS
- El sistema de autoguardado
- Repetición de puzles
- Duración