En octubre de 2020, siempre haciendo coincidir su lanzamientos con la época de Halloween llegó de la mano de Supermassive Games y Bandai Namco la segunda entrega de la colección de The Dark Pictures Anthology. En este caso le tocó el turno a Little Hope tras un primer notable Man of Medan. El segundo de cuatro títulos de terror con decisiones que irían llegando anualmente y de la cual ya hemos visto esas 4 entregas estrenarse. Con Little Hope se buscaba de nuevo ese susto fácil con una historia que nos llevaba a un pueblo con un pasado gris y oscuro. Ahora le llega el turno a Nintendo Switch de ver al fin el título en su pantalla con una adaptación que nos ha encandilado desde el primer momento.
Análisis Little Hope Nintendo Switch: tenerlo en tus manos es pura brujería
La historia de Little Hope nos pone en la piel de un curioso grupo compuesto por un profesor de universidad y sus alumnos que tienen un accidente en bus en una carretera cercana al no tan encantador pueblo de Little Hope. Little Hope es un pueblo famoso y plagado de oscuras leyendas e incluso el profesor conocía los antecedentes. Tras el accidente se encuentran con que el conductor del bus se ha dado a la fuga y con una niebla (que parece sacada de la saga Silent Hill) les impide moverse libremente y solo les concede un camino: el que lleva hacia el pueblo de Little Hope. A partir de ese momento viviremos terroríficas aventuras con este grupo basadas en decisiones y QTE.
La historia nos atrapa de principio a fin y logra que queramos estar pegados a la pantalla durante las entre 5 y 6 horas que puede llegar a durar el videojuego. Sin embargo el encanto de este tipo de juegos basados en decisiones es que podremos vivir diferentes acontecimientos y finales dependiendo de las acciones que vayamos realizando y los lazos que vayamos forjando. Y es que ya desde el inicio de la partida se nos permite seleccionar entre tres tipos de dificultad y se nos avisa que uno, varios o todos los personajes pueden llegar a morir durante la aventura. Por lo que si queremos ver todo el contenido que tiene que ofrecer Little Hope deberemos jugar decenas de horas.
Mención aparte merecen los momentos en los que un narrador (que se mantiene durante todas las entregas) nos habla directamente a cámara rompiendo la cuarta pared y nos interpela directamente, dándonos pinceladas de lo que está pasando y lo que puede llegar a pasar. Estaremos en contacto con él desde prácticamente el inicio de la aventura y supondrá un soplo de aire fresco entre capítulos que nos permitirá reflexionar sobre lo hecho hasta el momento.
Durante el transcurso de la partida iremos encontrando pistas ocultas a lo largo de los escenarios, de forma oculta. Podremos obtener diferentes finales en función de las pistas que obtengamos y algunos detalles extra sobre la trama que sólo podremos conocer a través de pistas.
Las relaciones y decisiones importan
Si hablamos del gameplay de Little Hope vemos que se mantiene en la línea de lo visto en el primer título y esto es toma de decisiones, forja de relaciones y quick time events. Por una parte tenemos la toma de decisiones. Frente a un problema o una toma de decisión se nos permite seleccionar entre tres posibilidades, una neutra, una más moderada y una más conflictiva. Conforme vayamos tomando decisiones el rumbo de la historia se irá actualizando, así como nuestras relaciones con el resto de personajes del grupo. Cada personaje tendrá una afinidad con el resto y eso afectará de forma directa a la historia. Decidir acompañar a un personaje u otro, apoyarle o dejarle de lado supondrá ramificar la historia y crear un camino diferente.
Por otra parte, al igual que sucede en otros juegos del género como los que nos ha brindado Quantic Dream a lo largo de los años tendremos que hacer frente a quick time events que requerirán de una rápida reacción de botones o movimientos en un periodo de tiempo muy corto. De lo bien o mal parados que salgamos de estos QTE también dependerá el rumbo que tome la historia e incluso la supervivencia o muerte de algunos de los personajes.
Gráfica y sonoramente es una sorpresa
Little Hope en Nintendo Switch rinde a un nivel espectacular. Esperábamos encontrarnos con una versión repleta de tiempos de carga que nos impidiese disfrutar de su buena historia, pero sin embargo los tiempos de carga prácticamente son inexistentes y el apartado gráfico en la híbrida de Nintendo luce de maravilla. Obviamente no raya al nivel de sus versiones originales pero sí aprovecha las capacidades de Nintendo Switch y no es preciso jugar a las primeras versiones para disfrutar de este juego en plenas condiciones.
En el apartado sonoro sigue siendo perfecto para acompañar a esta trágica y terrorífica historia con melodías que suenan en el momento preciso. Little Hope cuenta en su reparto con Will Poulter, reconocido por su papel en la película de terror de Midsommar y con una excelente interpretación de su narrador en lo sonoro, siendo el perfecto anfitrión de esta oscura trama.
Conclusiones finales
La llegada de Little Hope a Switch, nos ofrece la oportunidad de volver a visitar el pueblo y revivir su increíble historia. Temíamos por un port hecho con poco mimo y con problemas en cuanto a tiempos de carga y rendimiento, pero nos hemos encontrado con una versión muy sólida que podrán disfrutar tanto aquellas personas que ya jugaron en otro dispositivo como a los que quieran disfrutar por primera vez de esta aventura. Su portabilidad le da un toque extra ya que jugar en la cama con las luces apagadas a este videojuego es realmente terrorífico.
Puntos fuertes
- Una conversión excelente
- La trama sigue siendo increíble
- Rejugabilidad muy alta
Puntos débiles
- Los QTE a veces son demasiado rápidos
- No luce “tan” bien como las versiones originales
Hemos realizado este análisis gracias a un código de descarga para Nintendo Switch facilitado por Bandai Namco.
