The Chinese Room, creadores de otros grandes títulos como Dear Esther vuelven de nuevo con una aventura de desplazamiento lateral que recuerda a otras propuestas ya vistas como Inside que apuestan por una historia corta y una jugabilidad rápida y directa basada en pocos botones y que nos hará pensar. El estudio demostró ser experto en el género del walking simulator con sus anteriores trabajos y la cuestión será saber ahora si han logrado refinar su fórmula con una propuesta a priori totalmente diferente. El videojuego se publicó inicialmente solo a través de Apple Arcade, el programa de suscripción de juegos para móviles de Apple. Posteriormente ha llegado a consolas y PC (la versión que nos ocupa).
Análisis Little Orpheus: un explorador llamado a recuperar la gloria
La premisa argumental es sencilla, durante la guerra fría la Union Soviética manda a un explorador espacial al centro de la Tierra. Este explorador desaparece sin lograr recuperar una cápsula que contiene una bomba atómica y que da nombre al título: Little Orpheus. Tres años más tarde será Ivan Ivanovich, el hilarante protagonista de juego, quien retome la tarea inacabada con un sentido del humor que hará reír hasta a la persona más seria del planeta. Y es que ese tono cómico presente durante toda la aventura es el valor más diferencia de esta propuesta.
El videojuego consta de nueve episodios que van narrando ese viaje de Ivan Ivanovich hasta alcanzar el centro de la Tierra y con ello la ansiada Little Orpheus. Es un título de corta duración que podremos completar en cuatro o cinco horas y uno de esos juegos que siempre nos gusta intercalar con aventuras de más ambiciosa duración como un juego de rol o de acción de mundo abierto.
La narrativa se nos presenta mediante una voz en off y su jugabilidad se centra en un desplazamiento lateral con elementos de plataformeo y puzzles. Su gameplay nos recuerda al ya mencionado Inside pero sin llegar a esa maestría con la que el título de Playdead llegó a nuestros corazones. Y es que no olvidemos que se trata de un título heredero de dispositivos móviles, con las limitaciones que ello conlleva, y que nos llega con una experiencia casi 1 a 1 de lo ya vivido allí sin adaptaciones para las posibilidades que ofrece una consola o PC.
La voz en off supone el alivio cómico de la obra pero en muchas ocasiones vemos que no casa lo narrado con la parte jugable e incluso puede llegar a distraernos o podemos llegar a perdernos aquello que nos cuentan ya que el título llega con doblaje en inglés y si no controlamos el idioma no podremos estar leyendo y jugando al mismo tiempo de forma efectiva.
Un apartado audiovisual que se queda algo Little
El videojuego apuesta por un apartado gráfico de dibujo animado en 3D y que cuenta con unos buenos efectos de animación e iluminación. Sin embargo de nuevo la herencia de los dispositivos móviles lastra una experiencia que se podría haber mejorado al realizar la versión para consolas y PC. No obstante su apartado artístico sí que ofrece más alicientes que su apartado gráfico y el juego consigue meternos de lleno en esa ambientación espacial de un viaje loco que entremezcla naturaleza y dinosaurios en una extravagante propuesta que sin duda entra por los ojos.
Viajaremos de selvas a fondos marinos pasando por toda una serie de paisajes que literalmente nos harán sentir en un constante viaje entre capítulos muy bien marcados por su marco artístico. Pese a que la versión de PC haya sido tratado por el estudio como una remasterización, pensamos que se trata de un trabajo en el que se podría haber puesto un poco más de mimo.
Mención aparte para su traducción a nuestro idioma (pese al problema que hemos comentado anteriormente de la voz en off) y a su increíble banda sonora, que corre a cargo de la compositora Jessica Curry y que sabe qué melodía introducir en cada momento exacto para hacernos sentir parte de la historia que se narra. En ese sentido solo hemos vivido sensaciones parecidas al jugar por ejemplo a otro título que sabe introducir cada canción en el momento perfecto como es Death Stranding. Su apartado sonoro le da un plus de calidad a una obra que ofrece una premisa demasiado sencilla como para enamorar.
Conclusiones finales
Little Orpheus sabe introducir perfectamente una hilarante narrativa, una ambientación artística espectacular y unas melodías que se nos quedarán grabadas a fuego en la cabeza. Sin embargo en su apartado jugable peca de ser demasiado sencillo y arrastra ciertos problemas heredados de ser un título que fue pensado para dispositivos móviles. Se queda lejos de otras aventuras narrativas de desplazamiento lateral pero su corta duración hace que sea un juego perfecto para una tarde de lluvia.
PUNTOS FUERTES
- Apartado estético
- Banda sonora inolvidable
- Su toque de humor
PUNTOS DÉBILES
- Demasiado sencillo en sus mecánicas
- Algunos problemas técnicos por su herencia de móvil
