Ya tenemos con nosotros la nueva entrega de la franquicia de conducción desarrollada por Slightly Mad Studios y distribuida por Bandai Namco. Es hora de agarrar el volante y pisar el acelerador a fondo porque comenzamos el análisis de Project Cars 3 para PS4.
UNA PROPUESTA VARIADA Y COMPLETA
Arrancamos con uno de los aspectos más importantes en este tipo de videojuegos como son las opciones de personalización. En este aspecto el título cumple con creces en todos los apartados menos con el de nuestro avatar, el cual se limitara una serie de estándares predeterminados y poco más, dado que apenas tendrá sitio en pantalla. Quitando este punto negativo y centrándonos en el vehículo, aquí si que el trabajo está muy bien realizado, con multitud de elementos a nuestra disposición, tanto a nivel de diseño como de los propios componentes del coche. Podremos elegir el tipo de neumático, la marca, las llantas, pegatinas laterales o incluso darle nuestro toque personal a la matrícula.
Multitud de opciones que se reflejan también a la hora de los modos de juego, aparte del modo multijugador y las invitaciones, contaremos con un Modo Trayectoria, el cual será el eje principal de nuestra partida. El mismo se encuentra dividido por divisiones en función del potencial de los vehículos, conforme vayamos avanzando, iremos desbloqueando más fases, por lo que os aseguramos que las horas de diversión y contenido están más que aseguradas.
Sin embargo no se limitan en realizar solo carreras, sino que constantemente busca sorprender al usuario con otras modalidades como contrarreloj, minicampeonatos de dos o tres rondas, buscar realizar el mejor tiempo medio o incluso un modo demolición para ver cuantos puntos somos capaces de obtener. Lo mismo ocurre con los circuitos y los coches a nuestra disposición, todos muy variados con su propia personalidad que hará que cada vez que salgamos a la pista sea una experiencia totalmente nueva sobre todo si jugamos en dificultades avanzadas.
En resumen, en relación a la preocupación habitual de si el contenido y la duración de la parte single player justifica la compra del producto, creo que no se debe tener ningún temor dado que las horas de juego están más que aseguradas.
UN DOMINGO POR LA TARDE, FUI A LOS COCHES DE CHOQUE
Llegamos al apartado de la jugabilidad donde es el aspecto donde más problemas puede dar para el jugador. En esta nueva entrega de Project Cars 3 se ha decidido optar por la innovación y aportar elementos nuevos a la franquicia, pero esto ha hecho que en líneas generales la propuesta se haya quedado a medio camino entre simulador y arcade. Uno de los apartados que han sido eliminados es el combustible, así como las paradas en boxes o el desgaste de los neumáticos todo en pos de esta idea de sistema híbrido que hemos comentado y que quizás no acabará de convencer al fan acérrimo de la saga.
Este aspecto no tiene porque ser algo negativo del todo, lo único que sucede es que esto provoca confusión en el jugador dado que por ejemplo en las carreras nos encontraremos con rivales muy agresivos que en muchas ocasiones tratarán de chocar con nosotros y sacarnos de la pista algo que es característico del arcade. Que sucede, pues que a la vez dentro del mismo modo nos encontramos con misiones para realizar vueltas rápidas donde precisamente se busca el lado de simulador del título y donde nuestra destreza al volante será fundamental. De hecho un punto fundamental será controlar en muchas ocasiones las frenadas y los derrapes si queremos obtener el mayor rendimiento de nuestro vehículo.
En conclusión tenemos una mezcla de conceptos donde a nivel personal creo que se le saca mucho más partido por el lado de simulador, pero que en líneas generales aporta una experiencia positiva que a lo mejor no está todo lo equilibrada posible.
UN APARTADO GRÁFICO Y SONORO QUE NO SORPRENDE
Los gráficos y los títulos de conducción suele ser un tándem muy habitual en la historia de los videojuegos, precisamente por ser la vía perfecta para llevarlos a su máximo potencial. Sin embargo en este Project Cars 3 ya sea por limitaciones del hardware actual o por otros problemas, no ha apostado en esta entrega por este apartado. De hecho en la versión de PS4 Slim en la que hemos jugado de vez en cuando falla en algunos puntos o con algunos bajones de fps en condiciones de lluvia y con muchos coches en pista.
Tanto el modelado de vehículos en carrera como el resto de componentes de los circuitos lucen bien, pero no sorprenden e incluso en algunos puntos concretos son más que discretos. Así ocurre también con la iluminación, la cual sobre todo de noche no está todo lo conseguida que nos hubiera gustado al igual que la lluvia; nos encontramos con situaciones básicas que no alcanzan el nivel planteado por el resto del videojuego.
Lo mismo sucede en relación al apartado sonoro donde lógicamente no hay que mencionar la banda sonora, pero si es importante el funcionamiento de los sonidos en pista. En este caso vuelve a suceder lo mismo que en los gráficos, simplemente cumplen, pero no hay el mismo trabajo y dedicación al detalle que a lo mejor se ve en otros puntos del título.
CONCLUSIÓN: UNA NOTABLE PUERTA DE ENTRADA AL GÉNERO DE CONDUCCIÓN
Como conclusión vamos a recalcar las líneas generales que hemos explicado, Project Cars 3 es un notable propuesta que busca ofrecer al jugador un equilibrio entre lo mejor del simulador y la experiencia más árcade. Quizás no consiga convencer a toda la comunidad pero pensamos que es una propuesta notable y que sin duda nos ofrecerá una gran cantidad de horas de diversión y pura adrenalina.
