Análisis de Slave Zero X para PlayStation 5

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ANÁLISIS SLAVE ZERO X PS5 – PARA LOS AMANTES DE LO RETRO

Durante estos días he tenido la oportunidad de disfrutar de Slave Zero X, la nueva propuesta de Poppy Works y Ziggurat y la verdad es que… ha sido una grata experiencia como os intentaré reflejar en mi siguiente análisis para NextGame.

Es la hora de la revolución

El juego nos lleva a Megacity S-1, 5 años antes de los eventos de Slave Zero, dóndde acompañaremos a Shou en su revolución contra el sistema que gobierna el lugar. Un lugar que nos recordará a los Estados Unidos en el futuro y que se atreve a contar con un «All-Might» como uno de sus Guardianes.

Para lograr nuestro objetivo de acabar con el «emperador» nos haremos con el poder de X, un arma biointeligente que funcionará como armadura y con la que interactuaremos durante la aventura y que gracias a sus capacidades podremos hacer trizas a todos los enemigos que se interpongan en nuestro camino.

A su vez a medida que vamos superando las diversas fases se nos contará un poco del pasado de Shou y la «hermandad» que existe con su compañero de prácticas además de mostrarnos un poco más de su visión.

En general la historia me ha resultado atractiva pero dónde me hubiera gustado conocer algo más sobre su mundo aunque cuenta con una serie de coleccionables que podemos ir recogiendo por los escenarios.

Un hack ´n´slash añejo

En este punto debo ser sincero… le he notado muy tosco a la hora sobretodo de realizar las acciones de carrera y salto a la vez… y es que no entiendo como el personaje se siente sumamente pesado y le cuesta realizar esas acciones… un grave problema teniendo en cuenta, que aunque no son muchas, hay secciones de plataformas y una persecución esencial.

El movimiento sobretodo se debe a como se desplaza nuestro protagonista durante la aventura, siendo bastante destacado en el combate pero no durante todo el nivel. Y por desgracia esa lentitud se traslada también al combate.

Han habido secciones dónde el personaje al ser derribado le ha costado el alma levantarse. Si ha sido acorralado… me han encadenado golpes que me han drenado casi toda la vida… Secciones dónde los enemigos te vienen de ambos lados y le cuesta girarse para poder por lo menos provocar daño y retrasar el movimiento del enemigo que está a nuestras espaldas. Y esto lo podemos sumar a los combates contra jefes dónde el segundo y el penúltimo me he sentido completamente desprotegido.

Y digo desprotegido contra estos dos personajes pero realmente… han habido secciones que me han costado dios y ayuda debido a que la dificultad se ha elevado notablemente debido a la aparición de varios enemigos «acorazados» que deberemos derribar tres veces para acabar con ellos. Son variantes más poderosas dónde nuestros ataques no interrumpen los suyos y dónde para derribarlos deberemos hacerles el suficiente daño.

Son momentos bastantes complicados que se repetirán en unas cuantas secciones dónde, en el resto de casos, solamente nos encontraremos una cantidad abrumadora de enemigos que nos asedian contra un muro del escenario.

A pesar de todo… su jugabilidad me ha enamorado

Se que es contradictorio pero le he encontrado el gustillo por la sensación de «logro» cuándo he superado algunas de estas dificultades. Esta aventura anima al dominio de su sistema de control y a tener una pequeña «estrategia» para cada fase.

A nivel de combate no he podido evitar pensar un poco en la experiencia con el último Samurai Shodown debido a su sistema de combos por el que apuesta, aunque no por su variedad… y porque justamente el modo entrenamiento nos lleva a un dojo para aprender bien los movimientos.

Si queremos ser completistas la aventura nos animará a que obtengamos las clásicas calificaciones S que otros juegos del mismo género han introducido anteriormente. Unas calificaciones que nos podrán recordar a Devil May Cry debido a que nos valorarán entre otras cosas la variedad de movimientos que usemos, el daño recibido y el combo máximo que hayamos logrado acumular.

Para ello contaremos con nuestra catana, la ráfaga que es como una especie de escudo que podremos usar para repeler enemigos cuándo seamos acosados y que sirve como ataque o «la habilidad especial de X» con la que podremos potenciar nuestros ataques y recobrar algo de vida si realizamos la cantidad de daño suficiente.

Además contaremos también con un arsenal de elementos arrojadizos como granadas o Shurikens que podremos adquirir gracias a la tienda que aparece en algunas fases del juego o al final de los niveles.

Si que quiero destacar algo y es en relación a la jugabilidad siendo la crítica principal el sistema de checkpoints con los que cuenta el juego. En los primeros niveles, a pesar de que la dificultad es desafiante desde el principio, contamos con estos puntos de guardado de manera más continuada… y en cambio en los niveles finales puede llegar a ser desesperante.

Un ejemplo es cuándo estamos en los compases finales «para llegar al palacio» nos encontramos con un puente dónde en la sección final nos encontramos con un «acorazado». Pues como muramos en algún punto de ese puente nos tocará repetirlo… y cargaros a 100 enemigos contando las repeticiones puede ser desesperante y cansino… sobretodo porque como tengas la mala suerte de que sigan reapareciendo enemigos en la parte final… se sentirá como algo injusto.

Slave Zero X físico

El diseño de X junto al de otros enemigos es precioso

En este punto no tengo ninguna crítica salvo a los escenarios dónde en algunos momentos me ha dado la sensación de ser poco memorables.

Cosa distinta son los modelados de los personajes «principales» y algunos enemigos (experimentos) que me han llamado la atención. En el caso del diseño de X y cuándo vemos a los lugartenientes durante la presentación o ciertas conversaciones lo cierto es que llaman la atención.

Llaman además por el aspecto retro que han buscado desde el estudio de desarrollo y que llaman la atención dónde acompañados por una banda sonora disfrutable cumplen con su objetivo.

Conclusión

Como he dicho, a pesar de ciertos problemillas, lo cierto es que el juego me ha encantado pero entiendo que no es un juego para todo el mundo. Es un juego en el que debes ir preparado un poco para la frustración y que no te regala nada además de sentirse lento en los controles. Aún así es una experiencia recomendable para los amantes de los desafíos.

Puntos Positivos:
  • A pesar de todas las dificultades es un juego que se disfruta en su jugabilidad una vez te acostumbras
  • Su estilo de arte
  • Mención especial a los créditos del juego
Puntos Negativos:
  • Los escenarios no se quedan en la retina
  • Algunas secciones de plataformas por su sistema de control
  • Picos de dificultad demasiado elevados en las fases

CONCLUSIONES

Slave Zero X ha sido una experiencia desafiante en todo momento dónde la sensación de logro ha sido máxima tras haber realizado varios reintentos. Una experiencia recomendable para los amantes del género

NOTAS

Jugabilidad
7.5
Sonido
7
Innovación
7.5
Gráficos
7
Alejandro Miguel Mercado
Alejandro Miguel Mercado
Jefe de comunicación. Amante de los animales y los videojuegos. En ocasiones trabajo aquí.

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