LILO MI AMIGO EL COCODRILO CRÍTICA DE CINE
Estamos de regreso para los mas cinéfilos del lugar con una nueva crítica de una película que sin duda ha dado mucho de que hablar desde el momento de su primera presentación oficial y es que desde que Sony fechará esta interesante producción muchos son los que han aguardado hasta su fecha de estreno oficial este mismo 21 de octubre. Estamos hablando de Lilo, mi amigo el cocodrilo, así que tomad asiento y acompañadme en la crítica de esta simpática película para toda la familia.
PERSIGUIENDO SUEÑOS
La historia de esta película nos sitúa tiempo atrás donde acompañamos a un mago o soñador empedernido buscando triunfar en la gran ciudad con su show, este personaje interpretado a la perfección por Javier Bardem, no consigue alcanzar sus metas por más que lo intenté y poco a poco las deudas empiezan a hacer estragos en su día a día por lo que busca reinventarse de una manera de lo más peculiar, necesita un nuevo animal muy mono para su espectáculo. Es allí, en una pequeña tienda de barrio donde conocerá a nuestro simpático protagonista, Lilo, un cocodrilo que tiene una peculiaridad de lo más entrañable, sabe cantar.
Una entrañable amistad se va forjando entre humano y animal hasta que llega el día del gran estreno de su número musical, sin embargo Lilo se ve amedrentado por el público y su incapacidad para actuar ante la gente por lo que su querido «padre» se ve obligado a abandonarlo para huir de sus acreedores dejándole como único recuerdo y protección su casa familiar en plena «Gran Manzana».
A partir de este momento y sin entrar en más spoilers de los pertinentemente necesarios, avanzamos en el tiempo hasta la llegada a la morada de una entrañable nueva familia donde destaca la figura del hijo de la familia, el pequeño Josh. Un encuentro fortuito que sellará el destino y el devenir de ambos para siempre. En general, la trama de la película se mantiene entretenida a lo largo de las casi dos horas de duración, animada por sus diferentes números musicales y el ritmo bien marcado de sus momentos principales, no creo que el espectador se vaya con una sensación de pesadez o lentitud ante el devenir de los acontecimientos.
Esto no choca de forma directa sin embargo con lo que es la historia en si, una de corte divertido, familiar y que en ningún momento pretende ir más allá de eso, únicamente sigue una línea básica, tradicional y que no tiene como objetivo sorprender ni dejar boquiabierto al espectador, sino simplemente que disfrute el viaje de forma tranquila en compañía de los más pequeños.
Todo este trabajo se ve bien sustentado en parte por unas interpretaciones a la altura pero con trabajos un tanto dispares donde aunque creo que ciertos personajes no tienen sus tiempos bien medidos, en general alcancen un nivel notable. Javier Bardem vuelve a demostrar y ya no se cuántas veces van, su impresionante versatilidad y solo podemos esperar cuál será el próximo papel con el que nos sorprenderá. También el gran trabajo de Shaw Mendes sobre todo en el apartado musical interpretando a Lilo ya que precisamente las canciones y los momentos escogidos son perfectos, totalmente en sintonía con los sucesos de la película y de una calidad muy alta.
Donde dejaba entrever que me ha faltado algo más es en relación a ciertos personajes secundarios, no son muchos pero lo poco que salen se me queda demasiado corto y sin contenido, son utilizados de mero recurso, algunos de ellos sin lógica alguna, para que avance la trama de la película a la meta marcada. Por último me gustaría destacar precisamente el gran trabajo de CGI y conversión del cocodrilo Lilo algo que aunque ya parece que estamos acostumbrados, muchas veces no es tan fácil en la práctica y es que no desentona en ningún momento con el resto de personajes del elenco.
En definitiva Lilo, mi amigo el cocodrilo es una película muy simple en la narrativa, torpe en el apartado técnico y un tanto mediocre en el plano interpretativo pero sus números musicales, la calidez y momentos tan entrañables que nos regala este peculiar grupo, hacen que sea una película muy disfrutable para estos tiempos que se acercan de disfrutar en familia.
PUNTOS POSITIVOS:
- Los números musicales.
- Javier Bardem vuelve a regalar una gran interpretación.
- Un entretenimiento familiar de calidad.
PUNTOS NEGATIVOS:
- No todos los actores están al mismo nivel.
- Una historia demasiado predecible y llana.
- Momentos fuera de contexto y obligados por trama.
