Análisis de Nightmare Boy

El estudio español The Vanir Project nos trae Nightmare Boy, un nuevo juego de plataformas en 2D en el que viajamos al mundo de los sueños, aunque en esta ocasión nos esperan mas bien pesadillas, de las que deberemos escapar y rescatar a otros niños y niñas que también están atrapados.
El juego nos pone en la piel de Billy, un niño que entra en el mundo de los sueños por culpa de un mago en forma de almohada. En este viaje cambia nuestro aspecto, convirtiéndonos en una criatura verde. Como hemos indicado anteriormente, durante esta pesadilla deberemos rescatar a otros niños y niñas que también se encuentran atrapados, y además enfrentarnos a distintos tipos de enemigos.

El aspecto de Nightmare Boy recuerda a los clásicos de los años 90, apostando por un metroidvania, cargado de acción, plataformas y donde nuestra habilidad con los saltos será de gran importancia. En bastantes ocasiones tendremos que volver a pasar por escenarios en los que ya hemos estado.
Donde se encuentran algunos fallos es en el control, ya que en ocasiones no es lo preciso que nos gustaría. Los combates no son sencillos, y para ellos disponemos de un ataque básico a corta distancia. También contamos con una magia para realizar ataques a larga distancia, que según vamos avanzando en el juego conseguiremos distintos tipos de magia, pero esta tiene una barra que según vamos usando la magia
Además de estas magias para ataques, también iremos encontrando mejoras para la salud, para aumentar la barra de magia, segundo salto, y muchas más habilidades para mejorar nuestro personaje y poder conseguir nuestro objetivo.

En los escenarios y al derrotar a enemigos nos encontraremos gemas. Estas debemos cogerlas para poder guardar nuestra partida en los puntos de guardado, el despacho de La Parca. Eso sí, debemos tener en cuenta que el guardado tiene un precio de gemas, y este irá aumentando en cada guardado que hagamos.
Los jefes son unos de los puntos fuertes del juego, ya que cada uno tiene unas habilidades, y necesitamos estar concentrados y aprender sus patrones para conseguir derrotarlos. Aconsejamos no ir a lo loco y tener paciencia, ya que en pocos golpes pueden acabar con nosotros.
La música esta llena de efectos, con gritos de enemigos y de impactos, todo muy conseguido. Además, llega con textos en castellano.

-Conclusión:
Nightmare Boy nos recuerda a los clásicos juegos de acción y plataformas de los años 90, con el que nos hemos divertido y que además tiene ese punto de dificultad que acaba enganchando.