PROJECT NIGHTMARES CASE 36: HENRIETTA KEDWARD ANÁLISIS
Corren tiempos en los que los juegos de terror están viviendo una segunda juventud con la nueva vertiente que estamos experimentando en la actualidad. Muchos son los proyectos indies que se han animado con este género para dar a conocer su talento al mundo como es el caso de nuestro protagonista de hoy. Sed bienvenidos al análisis en Xbox Series de Project Nightmares Case 36: Henrietta Kedward.
ATRAPADO EN TU INTERIOR
La trama del videojuego nos propone a lo largo de sus tres horas de duración una experiencia inmersiva en el que la historia cobra vida a través de los diferentes objetos y «habitantes» de la mansión en la que nos vemos envueltos desde el principio una vez transcurrida la escena inicial de presentación. A partir de este momento la trama se diluye en gran medida dado el carácter «procedural» que intenta implementar el videojuego por lo que tendremos que dejar que sea la propia mansión la que nos cuente su historia.
La misma no está mal contando y nos mantiene en vilo a través de los diferentes sucesos que van ocurriendo y la propia tensión del momento. Además la duración del título está bien ajustada y esto hace que no nos permita diluirnos en un caos de documentos o de ideas que no llegan a ningún puerto. El resultado podía haber sido más satisfactorio y haber unido de forma más natural cada uno de los puntos vitales de la historia pero en líneas generales considero que ha habido un trabajo correcto. Esto lo comento porque, al optar por una estructura de walking simulator, la trama tiene que ser un elemento mucho más potente de lo que en ocasiones expone esta propuesta.
Por lo que avanzamos al otro pilar del videojuego como es su jugabilidad y es que ya he dejado caer entre líneas que no contamos con unas mecánicas jugables tremendamente elaboradas ya que el punto principal será interactuar con los objetos del escenario y estar a merced de los «sustos» que los desarrolladores han querido ponernos por el camino. Sin embargo hay una mecánica en concreto que si que llama mucho la atención y son las zonas de «persecución» y la capacidad utilizar la sal como arma de defensa cuando nos veamos abordados por los enemigos. Estas zonas incrementan exponencialmente la tensión y es que deberemos ser muy cautos y controlar muy bien nuestros nervios para poder superar estas zonas y continuar por espacios «seguros».
En líneas generales, Project Nightmares Case 36: Henrietta Kedward ofrece una experiencia muy disfrutable, con elementos por pulir y mejorar pero con una atmósfera de terror y suspense que hacen de esta oferta un producto a destacar y muy a tener en cuenta para los fans del género.
