THE LAIR 2022 CRITICA – LA GUARIDA
Esta semana se ha estrenado una de las películas que pudimos disfrutar en la Sección Oficial de la 32ª edición del Festival de Cine Fantástico de Málaga, que pudimos cubrir el pasado noviembre. Estamos hablando de ‘La guarida’ (The Lair), la última película de Neil Marshall, director de ‘The Descent’, que se ha estrenado este viernes en cines.
Como ya indicamos en el anterior artículo sobre el festival, ‘La guarida’ es una película bastante esperada, sobre todo por la anterior filmografía de su director, donde encontramos obras como ‘Centurión’ o la última versión de ‘Hellboy’. No obstante, su última película sigue la estela ya iniciada en ‘The Reckoning’, ya que mantiene su colaboración con la actriz Charlotte Kirk y, por tanto, el estilo de serie B que ya pudimos ver en su anterior obra y que no terminó de gustar a todo el mundo.
Un monstruo que ya conocemos
‘La guarida’ sigue la historia de Kate, una piloto de la RAF que resulta herida en su última misión en Afganistán. Tras este accidente, es asaltada por los rebeldes enemigos, por lo que se ve obligada a refugiarse en un antiguo búnker soviético. En él, descubre que se almacenan una serie de criaturas más monstruosas que humanas, nacidas a partir de la experimentación con ADN alienígena. Malherida, consigue escapar del laboratorio secreto y es rescatada por soldados occidentales, que no terminan de creer la existencia de dichos monstruos. Sin embargo, pronto descubrían que se trata de una amenaza real.
Tal y como podemos apreciar por su argumento, estamos ante una película de acción con ciertos elementos de terror, muy al estilo de la saga cinematográfica de Resident Evil o Underworld. De hecho, tanto en su forma como en su historia, se recopilan gran parte de los clichés del género. Parece una película hecha mediante una fórmula conocida y ya gastada, sin originalidad y sin sorpresa. Y en parte, esto es cierto.
Sin embargo, apreciamos que es algo realmente intencionado. La película adquiere esos clichés y los plasma sin vergüenza, llegando a tener un estilo muy de serie B y dando lugar a una película entretenida y divertida. En ocasiones, llega a parecer más bien paródica, ya que algunas situaciones son demasiado exageradas o ridículas. Por ello, la clave para disfrutar esta película es no tomársela muy en serio y dejarse llevar por el festival de balas, sangre y acción que nos propone.
Por tanto, una parte bastante importante a la hora de disfrutar de ‘La guarida’ depende de las expectativas y actitud que lleven los espectadores a la hora de verla. Si esperas una película de acción seria y con cierta profundidad, te vas a llevar una gran decepción. Pero si solo buscas pasar un buen rato y no te lo tomas muy en serio, es muy probable que la acabes disfrutando, ya que reconocerás la fórmula que sigue la película e incluso te divertirás con ella.
Esta actitud fue la que tuvo la mayoría del público de la última edición del Fancine en la proyección de ‘The Lair’, ya que hubo risas, aplausos y vítores en ciertas escenas. No obstante, es posible que, salvo excepciones, el público general no vaya con la misma actitud y se lleve cierta sorpresa (o chasco).
Un baile entre la acción y el terror
Una vez aclarada la propuesta de la película, cabe decir que su apartado técnico está completamente al servicio de la misma. Encontramos una fotografía que se mueve entre el mundo de la acción y el terror en sus colores y sus luces. Esto resulta especialmente reconocible a través de las localizaciones de la película, donde el exterior del búnker y el interior del mismo se encuentran claramente diferenciados.
En el exterior, encontramos una iluminación natural, colores más suaves y un entorno natural y amplio centrado en los desiertos de Afganistán. En el interior, encontramos un ambiente oscuro, con poca iluminación y en ocasiones de tonalidades rojas, colores mucho más saturados y agresivos y un lugar opresivo, peligroso e inquietante.
A través de estos dos lugares, se combina la acción y el terror, que también está presente en otros apartados como el sonido, la música y el montaje. En este sentido, se consigue jugar con la tensión y crear momentos cargados de dinamismo y movimiento, especialmente aquellos protagonizados por los monstruos. De hecho, en mi opinión, los momentos más cercanos al terror son más estimulantes que los de acción.
En relación con esto, encontramos un estilo que se mueve entre lo clásico y lo cutre, como podemos distinguir en el grafismo de la película. Ahí se aprecia esa intención paródica y cómica que está presente en ‘La guarida’ y que se refleja a la perfección en sus personajes completamente estereotipados hasta el punto de resultar ridículos y exagerados. Pero como ya hemos indicado, es algo realmente consciente, por lo que las actuaciones de los intérpretes funcionan a la perfección en ese sentido, ya que consiguen reflejar esos arquetipos con exactitud, sin resultar serios ni creíbles.
Sin nada más
Pese a ser una película disfrutable, ‘La guarida’ no es especialmente carismática en nada. La plasmación de sus referentes es tan clara y evidente que no hay espacio para la originalidad. Esa falta de autoría provoca que la película carezca de la personalidad necesaria para que sea memorable. No consigue crear nada que sea icónico por la poca fuerza que tienen su historia, sus personajes y sus acciones. De este modo, la representación que hace de los clichés del género se convierte en su peor enemigo, ya que se convierte en una película más.
Por ello, es muy posible que tanto el público como la crítica se olvide de ella pasados unos días o, incluso, unas horas. En ese sentido, se trata de una oportunidad perdida por falta de ambición o de inventiva. Hubiera sido más recomendable haber aprovechado sus referentes para dar una base a la película, que se podría haber decorado con aspectos más originales o autorales como un monstruo más icónico, un personaje más memorable o una historia más profunda.
Una película para pasar el rato
En conclusión, ‘La guarida’ es una película estupenda si quieres pasar un rato entretenido y no te tomas muy en serio la experiencia que te propone. Vas a poder disfrutar de todo aquello que conoces acerca de la acción y el terror y, con suerte, vas a reírte bastante. Pero más allá de eso, se trata de una película sin demasiada personalidad, sin nada especialmente carismático y que, muy probablemente, terminarás olvidando a favor de otra obra más estimulante u original.
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