Una de las sagas de videojuegos más querida por los jugadores es Tales Of, que lleva ya 25 años dándonos sus historias y trayéndonos personajes a los que muchos queremos. Es una saga que en sus principios no llegó a Europa, pero cuando lo hizo fue a lo grande y para quedarse. Ha pasado por malas rachas y sus videojuegos, la mayoría, no han llegado traducidos a nuestro país, pero eso no ha hecho que los fans nos olvidáramos de ella, sino todo lo contrario. Así que vamos a hacer un viaje por su historia, que no es poca, y por sus videojuegos, grandes joyas de los RPGs.
Tales of (Teiruzu Obu, que significa «Relatos de» o «Cuentos de») es una franquicia japonesa de videojuegos de rol publicados por Bandai Namco y desarrodados por Namco Tales Studio. El primer título de la serie, Tales of Phantasía, fecha de 1995 y el último, Tales of Arise, que salió en este año 2021. En total contamos con catorce juegos de la historia principal. Esta saga cuenta con una extensa lista de juegos derivados que a menudo abarcan otros géneros que no forman parte del Rol, que pueden sumar una cantidad de 50 títulos. Muchas secuelas creadas cuentan con apariciones de otros personajes de la serie principal, y los videojuegos no tienen relación entre sí. Cada uno tiene su historia independiente, excepto Tales of Xillia y Tales of Xillia 2.
De los catorce juegos que componen esta gran saga principal, nueve han sido publicados en Norteamérica y Europa, muchos títulos no han conseguido salir de Japón. Y de esos nueve no todos han sido traducidos más que en el idioma inglés. Una de las trabas más importantes por lo que la saga no puede llegar a muchas personas que no sean de habla inglesa.
Namco (el origen de Namco Bandai) se fundó el año 1995, de la mano de Masaya Nakamura (NAkamura Manufacturing COmpany). Para fusionarse en 2005 con la juguetería Bandai, transformándose en Bandai Namco Holdings, Inc.. Una de las empresas de entretenimiento más grande de Japón.
Namco Tales Studio fue una compañía de desarrollo de videojuegos que se fundó en el año 2003. Originalmente se llamaba Wolfteam, pero cuando la compañía Telenet Japan vendió parte de sus acciones de la compañía, Namco se convirtió en la propietaria de esta. Y renombró a la compañía para fortalecer su marca. Encargándose de desarrollar la serie de juegos de la saga Tales of, tarea de la que se encargaba Wolfteam en un principio. A día de hoy Namco Tales Studios continúa siendo la compañía desarrolladora de la saga, con excepción de Tales of Legendia.
Ahora hablemos un poco más a fondo de la saga. Cada título de la serie principal, y muchos de los spin-off, poseen un sistema de batalla llamado «Linear Motion Battle System«. En la mayoría de los juegos de la serie no hay batallas aleatorias. Los enemigos son visibles en el mapa, y la batalla empieza cuando el personaje entra en contacto con ellos. En este sistema, el jugador se mueve en plano horizontal y la ejecución de los ataques se da en tiempo real. Más adelante, con el salto al 3D, el jugador también puede moverse libremente en el plano pero sólo puede atacar en un eje 2D horizontal. En ese aspecto, los Tales of, siempre han ido evolucionando con el paso de los años, adecuándose a las nuevas generaciones y haciendo, a la vez, que no pierda su esencia por mucho que el combate vaya cambiando.
Un aspecto muy valorado en los juegos de rol es siempre la historia que cuentan, y en los Tales of siempre encontramos una que nos deja con buen sabor de boca. Generalmente empezamos con un objetivo más mundano, como por ejemplo, arreglar la fuente de agua del barrio en Vesperia o cazar unos jabalíes para cenar en Berseria. Conforme avanzamos, ya en los primeros compases empiezan a pasar cosas que obligan a los personajes a seguir ciertas rutas que no habrían tomado bajo otras circunstancias. Además, cada historia es distinta. No pecan de repetitivos, ya que manteniendo los ejemplos anteriores, en Vesperia nos toca ir buscando a un ladrón mientras que en Berseria somos vistos como enemigos por toda la sociedad por lo que somos. No obstante, sí que tienen algo en común, y es lo mismo en la gran mayoría de juegos de rol: salvar el mundo.
Tales of tiene muchos fans alrededor del mundo, incluso una servidora. Pero son los llamados Tales Of Twin unos de los más fanáticos de la saga. Y tuvimos la oportunidad de hablar con ellos. Son de las pocas personas que pueden decir que han adquirido gran parte de los videojuegos de la saga, además de ser coleccionistas de la misma. Y nos lo demostraron con sus preciosas fotos de todo lo que tienen de esta gran serie de videojuegos.
Les pregunté cuál era su Tales of favorito y no dudaron en la respuesta: Tales of Symphonia. «Fue el primer juego de la franquicia que tuvimos, como tantísimos otros fans de la saga en España, ya que fue el primer título de Tales of en llegar de manera oficial al mercado europeo, que hasta la fecha, había estado excluido de los tantísimos lanzamientos de la franquicia. Nos acordamos perfectamente de aquel viernes 19 de Noviembre de 2004, que fuimos a recoger nuestra copia del juego al por entonces Centromail de nuestra ciudad. Unos días antes había sido nuestro cumpleaños, y como solíamos hacer por esa fecha tan especial, rebuscábamos dentro de los catálogos de los grandes almacenes y de las tiendas de videojuegos, y entre tanta opción en aquellos tiempos, nos topamos con la genial portada de Tales of Symphonia, que directamente nos cautivó»
Me contaron cómo el primer fin de semana con Symphonia fue realmente mágico. Su padre fue al instituto a recogerles en coche con el juego recién comprado en el asiento de atrás. Tras llegar a casa y comer encendieron la GameCube y se pusieron a jugar con el videojuego los dos hermanos juntos. Les marcó tanto ese título que, tras varios meses jugando, se empezaron a informar sobre la saga a la que pertenecía. Y así es como nació su pasión por la franquicia.
¿Qué significa la saga Tales of para alguien como ellos? os preguntaréis.
«Como hemos comentado, los juegos de rol japonés ya nos encantaban por aquella época, viniendo de jugar absolutas obras maestras del género como Grandia2 y Skies of Arcadia en nuestra Dreamcast, y aunque disfrutábamos al máximo de aquellas aventuras, mientras nos solíamos turnar para que un gemelo jugase mientras el otro veía, y viceversa, lo que nos ofreció Symphonia de poder jugar ambos hermanos al mismo tiempo y disfrutar a la vez, nos maravilló completamente». Me contaron. Conforme fueron creciendo y jugando las diferentes entregas que iban apareciendo, su amor por la misma iba creciendo. Y es que Tales of se sale de los estándares de otros juegos de rol, donde en lugar de darle importancia a los gráficos realistas, se mantenía continuamente una estética visual de fantasía que les cautivó locamente. «A parte de todo lo anterior, la franquicia Tales of fue muy importante para nosotros también, porque nos ayudó en una época muy difícil de nuestra vida, donde por temas de salud nos vimos obligados a yacer enfermos en casa durante largos periodos de tiempo durante algunos años, y aquella ventana a esos mundos tan coloridos y fantásticos, era una medicina alternativa perfecta que nos ayudó a sobre llevar todo aquello».
Todos los jugadores tenemos nuestro videojuego, al que siempre volvemos cuando estamos mal. Al que recurrimos para evadirnos de la realidad. Aquél título que hemos jugado tantas horas sin cansarnos Y es que los Tales of son pilares muy importantes para muchos jugadores. Un ejemplo lo tenemos aquí mismo, con estos dos gemelos que disfrutaron juntos de estas obras maestras de los videojuegos.
Y, ¿vosotros? Habéis jugado alguna vez algún título de la franquicia? Tenéis algún favorito por encima de los demás? Yo conocí la saga gracias a Tales of Eternia, de la consola portátil PSP. Me enamoró tanto su estilo que después quise ir a uno de los juegos que dieron comienzo a la saga: Tales of Phantasia. Y así hasta el día de hoy, adquiriendo todos los títulos que llegan a Europa y en sus versiones coleccionistas. Porque Tales of siempe roba el corazón de aquellos a los que conocen la franquicia. Y nunca es tarde para adentrarse en alguna de sus historias. Sea cuál sea. Porque todas tienen algo que te acaban atrapando y ya no puedes salir de ellas.