DOOM Eternal estaba previsto lanzarse el 22 de noviembre pero justamente un mes antes de su lanzamiento anunció que se retrasaba hasta el 20 de marzo para cumplir con las expectativas de los jugadores.
Ahora tras una reciente entrevista concedida por Marty Stratton, ha confesado que durante la mayoría del 2019 el estudio, ID Software, estaba sufriendo la enfermedad del crunch que tanta importancia ha ido teniendo en los últimos tiempo. Más concretamente destacaba que al estar los equipos divididos esos efectos del crunch se iban «repartiendo» afectando primero a un equipo y puede que al acabar pueda sufrirlo otro o no. Pese a estas confesiones destaca que en algunas ocasiones son las propias personas las que desean trabajar más para que el juego salga perfecto comentando a su vez que siempre intentan ser respetuosos con el tiempo y la vida social y familiar de su personal.
Lo cierto es que debido a la ampliación de los plazos esta posible carga de trabajo se ha podido ver reducida en parte pero seguramente durante estos últimos dos meses puede que vuelva a suceder como ha pasado en otras grandes producciones.