El mundo de los videojuegos ha dado pasos de gigante en su evolución desde la llegada de Internet. En un primer momento, los avances que experimentaban este tipo de juegos tenían que ver más con los aspectos técnicos, sobre todo, en lo que respecta a los gráficos y a la jugabilidad. Poco a poco los videojuegos fueron ganando complejidad: las tramas pasaron a ser más enrevesadas y elaboradas, y la imagen 2D y las plataformas fueron dando paso a mundos más completos, con diferentes profundidades y perspectivas, por no hablar de la irrupción en escena de los juegos de mundo abierto en la que los jugadores pueden explorar un universo a su antojo; la historia ya no está guiada como si fuese por unas raíles, sino que son los propios jugadores los que deciden por dónde transcurrirá la historia, moviéndose libremente por los mapas y descubriendo las sorpresas e interacciones que encierran.
Internet, e-Sports y… ¿apuestas deportivas?
ero la llegada de Internet ha hecho posible una modalidad que arrasa en todo el planeta: el juego online, la interactividad que ha llegado incluso a plataformas de juegos de casino como Betway móvil. De esta forma, los jugadores dejan de enfrentarse a una inteligencia artificial, con sus patrones y algoritmos de comportamiento, para hacer frente a otros jugadores de carne y hueso, mucho más impredecibles. Este modo de juego ha llevado la competitividad de los videojuegos a otro nivel. Tanto es así que han surgido infinidad de torneos —muchos de ellos de carácter oficial— en los que un grupo de jugadores se enfrenta entre sí para determinar quién es el mejor de todos. Un espíritu competitivo como en el que se basa el deporte de élite.
Juegos como Dota 2, Counter Strike, la saga de FIFA, Tekken y muchos más —la lista es realmente larga— han creado competiciones de categoría mundial con millones de seguidores. Todos estos torneos forman la nueva generación de deportes, los e-Sports, una tendencia en plena expansión que parece imparable. Por supuesto, esas competiciones cuentan con premios millonarios y con unas audiencias que hacen palidecer a las de ciertos deportes tradicionales. El poder de este tipo de torneos es tan grande que ya son muchas las marcas que se asoman a estos eventos e invierten fuertes sumas de dinero en patrocinios. Alrededor de los e-Sports hay toda una industria floreciente de la que habrá que estar muy pendientes en los próximos años para saber qué dirección toma.
Ni que decir tiene que casas de apuestas como Betway van a estudiar al milímetro la evolución de los deportes electrónicos porque les pueden permitir alcanzar a un perfil de consumidores diferente, lo que supone nuevas oportunidades para seguir creciendo, sobre todo, en un contexto que se ha vuelto muy incierto debido a la pandemia del coronavirus. Los e-Sports ofrecen un entorno seguro completamente aislado de la COVID-19, de modo que pueden garantizar con mayor seguridad que empresas como Betway puedan seguir desarrollando su actividad con normalidad. No obstante, las bookies aún deben encontrar la manera de crear una sinergia perfecta con los deportes electrónicos tal y como en su día hicieron con el deporte tradicional.