Jason Schreier, de Kotaku, se ha puesto en contacto con unos 90 empleados de Rockstar tras las declaraciones del directivo de la empresa, Dan Houser, en la que mencionaba que habían llegado a trabajar 100 horas semanales, aunque más tarde puntualizó que solo fueron 4 personas y que las jornadas extendidas no son obligatorias en la empresa. Estos 90 trabajadores, algunos actuales y otros que ya han abandonado la compañía han querido contar su experiencia con este tipo de forma de trabajo, con grandes jornadas de trabajo y pocos descansos conocidas como crunch.
A pesar de no ser obligatorio, los trabajadores han querido puntualizar varios detalles. El primero de ellos es que siempre queda el miedo de que si no lo hacían, podrían ser despedidos o perder bonus y el segundo de ellos, la posibilidad de no aparecer en los créditos.
También es importante aclarar dos puntos. En este caso, y hablando de Rockstar, que los trabajadores con los que se ha contactado no son solo de Red Dead Redemption 2, que fue el juego con el que se desató la polémica, y que, por otro lado, no sucede en todo el estudio, sino que depende del jefe o departamento al que pertenezcan.