La Gamepolis 2023 continuó su recorrido con una segunda jornada (nuestra compañera Laura Carnicer ha hecho una crónica de la primera jornada) en la que pude probar PlayStation VR2 (concretamente, Horizon Call of the Mountain), así como otros videojuegos de diferentes plataformas de los que hablaré más adelante. No obstante, el plato fuerte fue poder disfrutar de la presencia de Lorenzo Beteta (doblador de Joel en los videojuegos de ‘The Last of Us‘ y en la serie de HBO), así como de la música de la popular Elesky.
Luces y sombras de esta edición
He de decir que mi experiencia con PlayStation VR2 no fue la mejor. Tras estar más de dos horas esperando, sufrí unos problemas con los controles que, prácticamente, me impidieron jugar. Por otro lado, la imagen se veía excesivamente borrosa. Así, mis 10 minutos de «juego» pasaron y mi sabor de boca no fue el mejor.
Dicho esto, intuyo que la renovada apuesta por la realidad virtual de Sony puede ser bastante más satisfactoria y no debo sacar conclusiones definitivas basándome en lo que he contado en el párrafo anterior. En este sentido, la mayor crítica que puedo realizar a la compañía nipona es que su stand contaba con un número muy limitado de trabajadores, lo que dificultaba notablemente la organización e impedía resolver incidentes eficazmente.
Por otro lado, había varias PS5 para probar videojuegos como ‘The Last of Us Parte 1‘, ‘God of War Ragnarök‘ o ‘FIFA 23‘. Aquí debo decir que hubiera sido conveniente limitar los tiempos de juego para evitar excesos por parte de algunos usuarios, así como acotar los fragmentos jugables para esquivar spoilers innecesarios y potenciar momentos que mostraran adecuadamente las virtudes de los títulos expuestos (por ejemplo, se puede sacar poco en claro de ‘Horizon Forbidden West’ si me encuentro con Aloy en mitad de un poblado que no conozco).
Por el contrario, los espacios de Nintendo contaban con una mejor organización. En primer lugar, sus propuestas jugables no estaban tan concentradas desde un punto de vista espacial aunque, probablemente, el hecho de ser patrocinador de Gamepolis le otorgó mayores facilidades en este aspecto. Asimismo, existía un mayor número de trabajadores que, como consecuencia, pudieron prestar una mayor atención a las necesidades de los usuarios que se acercaban.
Ahora bien, considero que Nintendo cometió un error similar al de Sony con las pruebas de sus juegos. Puedo apreciar ciertas cualidades del recientemente lanzado ‘Pikmin 4‘ incluso si cojo el mando en un momento descontextualizado, pero no puedo profundizar demasiado, salvo que juegue durante una cantidad de tiempo inasumible en esa situación.
La siempre bienvenida presencia de las zonas arcade e indie
Otro lugar destacado de Gamepolis fue el dedicado a las máquinas recreativas que Arcade Planet, el salón arcade más grande de España (situado en Sevilla), trajo para la ocasión. Resultaba muy atractiva la variedad de máquinas disponibles para probar, pero no se puede obviar que el nivel de conservación de alguna de ellas podría ser mejor. Por ejemplo, la recreativa de ‘Theatrhythm Final Fantasy: All-Star Carnival‘ se estropeaba frecuentemente, mientras que los tambores de ‘Taiko no Tatsujin‘ no siempre respondían adecuadamente a los golpes de las baquetas.
De nuevo, se echó en falta un mayor número de trabajadores dedicados a resolver dudas y problemas. Debe señalarse que la mayoría de máquinas se encontraban en japonés y aunque había ciertas instrucciones en castellano, un mayor apoyo humano hubiera sido muy útil para evitar ciertas confusiones.
En cuanto a la zona indie, solo pude probar ‘Space Devil VR‘, una propuesta de terror espacial en realidad virtual que, pese a contar con ciertos bugs, ofrecía una correcta experiencia con aciertos como el ingenioso uso dado a una linterna que debe sostenerse en todo momento para alumbrar las zonas oscuras que nos rodean.
Una sesión de doblaje en directo y un concierto popular
Dicho esto, los platos fuertes del día fueron el citado encuentro con Lorenzo Beteta y el concierto de Elesky. Beteta mostró un gran carisma y aportó jugosos detalles. Por ejemplo, contó que no se enteró de que iba a doblar a Joel en la adaptación de HBO hasta casi el mismo momento en el que se puso a trabajar, haciendo evidente el enorme secretismo que rodea a estas grandes producciones (incluso para muchos de los directamente implicados).
El momento más interesante del evento vino cuando Beteta dobló en directo algunos momentos del videojuego y de la serie. Fue estimulante observar en directo cómo se llevaba a cabo este trabajo, así como poder admirar la enorme calidad y profesionalidad de este reputado actor de doblaje.
Asimismo, hubo espacio para el humor, pues Beteta y Hermoti (presentador y también actor de doblaje en la adaptación televisiva) doblaron con un tono cómico una de las escenas de la serie. Fue un momento que encantó a los allí presentes (el auditorio estaba abarrotado) y supuse un estupendo cierre de la actividad.
Por otro lado, el concierto de Elesky, intérprete de música de videojuegos muy conocida en redes sociales, también generó una gran expectación y volvió a dejar el auditorio casi sin asientos libres. Se fomentó la participación del público, de manera que fueron habituales los aplausos, las palmadas y, en general, las muestras de júbilo de los fans.
Debo confesar que no terminé de conectar con lo propuesto por Elesky. Probablemente, porque muchos de los videojuegos protagonistas no conectan con mi biografía como jugador, pues Nintendo estuvo muy presente y nunca he sido un jugador demasiado habitual de ese ecosistema. Además, creo que los sonidos generados por un piano (instrumento que toca Elesky) no encajan adecuadamente en la banda sonora de ciertos videojuegos; por ejemplo, me parece bastante contraproducente suprimir el trágico llanto de las guitarras del tema principal de ‘The Last of Us‘.
En definitiva, esta segunda jornada ha sido intensa y satisfactoria pese a las incidencias comentadas. Siempre es un placer acudir a Gamepolis.