Análisis de Bleak Faith: Forsaken
La moda de los Soulslike sigue su rumbo y hemos tenido ya muchos tipos y visiones creativas; desde jugar con personajes de cuentos de una manera única y especial como Lies of P e incluso propuestas más enfocadas a la acción como son los recientes Stellar Blade y Rise of the Ronin. De los tres mencionados cabe destacar que funcionan a las mil maravillas como videojuego y como exponente de este subgénero. Bleak Faith: Forsaken ni siquiera llega al mínimo considerado como un videojuego mediocre y lamentablemente deja una huella en la que no todo vale.
Puede parecer una broma o incluso una exageración pero cuando digo que no llegar al mínimo considerado es que sinceramente creo que está lejos de que se pueda considerar un proyecto terminado o como mínimo testeado. La primera puesta a escena es de movernos y los controles responden mal, como si fuera una prueba de juego de un motor gráfico. La cámara responde de forma negativa; con giros bruscos con tan solo pulsar levemente el joystick.
De hecho poco podemos hablar del aspecto narrativo ya que la cinemática inicial no cargaba bien. Insisto, no cargaba; no podía entender nada de lo que estaba pasando y eso entorpece de entrada el cómo va a funcionar Bleak Faith: Forsaken. El combate a veces funciona y otras veces no. La kinestética es inexistente y eso en un soulslike es fundamental. Sin kinestética, el videojuego está sentenciado y no debe de ser jugado.
Un último detalle a comentar es que, en mi caso, he tenido 4 crasheos casi seguidos; uno muy grave obligando a reiniciar la consola y a tener que desinstalar rápidamente el videojuego. Estas cosas al final suceden aleatoriamente y no podemos hacer nada al respecto, pero prefiero dejarlo claro por si hay algún valiente que vaya a comprar el título; una idea muy poco recomendable incluso si eres un fan de Dark Souls y compañía.
Bleak Faith: Forsaken es un error que no tenía que haber salido al mercado. Su aspecto visual y la idea puede ser interesante a simple vista pero más allá de lo que vemos inicialmente nos encontramos con un proyecto sin terminar; que apenas llega a funcionar en lo básico y que sinceramente creemos que es de lo peor que se ha podido jugar en lo que llevamos de año. Menos mal que no empaña todo el camino recorrido por estudios como FromSoftware, Koei Tecmo y demás.