Análisis de Blood West
Da verdadera pena cuando un título tiene buenas ideas y nuevas mecánicas que no llegan a buen cruce. Blood West es un título desarrollado por Hyperstrange que tal vez le faltaba un tiempo de cocción en las primeras etapas porque a primera vista puede no llamar la atención por su apartado técnico o su diseño. Ojalá fuera un caso de que, tras los primeros compases, el título lo da todo y reluce… pero no, y mira que lo intenta.
Ante todo, estamos ante un acceso anticipado y parte del contenido será mejorado con el tiempo pero dada la situación y que el desarrollo parece ya al completo, toca hacer el análisis y quiero destacar antes de entrar en los diferentes apartados que me gusta mucho que sea un juego de acción y terror con leves retazos de «Soulslike«. Blood West también es un juego que tiene fases de sigilo… bueno, casi niveles enteros basados en no hacer ruido o huir del enemigo.
Cuando mueras, el juego te penalizara con volver al último punto de control -los llamados totems- y además tu personaje enfermera, haciendo aún más tedioso esa segunda oportunidad o tercera. Cuando tengamos cualquier arma, los enemigos morirán en pocos golpes… haciendo de opcional o de mecánica inservible el sigilo comentado, algo bastante estúpido.
Como cité en un párrafo anterior, en general jugablemente se pierde en sí mismo. No puede ser que en las pocas horas de juego que tenemos disponible todo se resuelva igual; la de correr mientras disparamos para que no nos maten de dos puñetazos. Falta verticalidad en el escenario; profundidad y más variedad de armas.
En el desarrollo de un proyecto la captación de nuevas ideas es un pilar fundamental, pero para que ello se lleve a cabo hay que desarrollarla y Blood West palidece en eso. Ni su visión sobre la acción y el sigilo son decentes y la infiltración es mediocre. Tal vez para el usuario que quiera probar una experencia nueva sea apetecible pero pasará sin pena ni gloria.