ANÁLISIS FINAL FANTASY VII REBIRTH PC
Como cada vez ocurre con más intensidad, los juegos exclusivos de consola cada vez llegan más (y antes) a PC. Si hablamos de la casa PlayStation, está cada vez más claro su giro a esta estrategia. Tras amortizar las ventas en su consola de manera exclusiva, es turno ahora de ver como funciona Final Fantasy VII Rebirth tanto en PC como en Steam Deck.
No quiero extenderme en relación a la parte jugable. Ya analizamos el juego en su salida en PlayStation y no quiero repetirme de nuevo. Os dejo aquí nuestro análisis y sólo remarco que estamos ante un juego extenso como pocos, con multitud de actividades a realizar y que continua el viaje de Cloud y compañía. Nos queda una tercera parte para asistir al clímax de este remake de uno de los juegos que marcaron época en los 90 y que aún a día de hoy sigue muy vigente.
Prefiero centrarme en la versión de PC y, más concretamente, en como se ve en Steam Deck. En lo técnico, en PC creo que, en líneas generales asistimos a un muy buen port con amplias opciones de personalización gráfica. Como en todo juego que se ejecute en PC, el rendimiento irá en función de tu equipo, pero si repasas los requisitos, verás como no son muy elevados en relación a la calidad gráfica que nos ofrece el título de Square Enix.
Lo que si es algo más discutible es el sistema de reescalado que tiene el juego. Para quienes no lo sepan, el reescalado es, hablando claro, ese “dopping” que usan las nuevas tecnologías de las gráficas para poder ofrecer un rendimiento mejor “multiplicando” pixeles y generando más frames. Es decir, es acomodar el rendimiento del juego en equipos más modestos.
Lo que me desagrada del sistema de reescalado es que es más complicado de lo que debería ser y que su alcance es algo limitado. Puedes elegir entre tres opciones de antialiasing (AA, no escalado): TAA, TAAU y DLSS si tienes una GPU Nvidia RTX. Para esa resolución dinámica podrás elegir de entre 4 opciones: 100%, 66%, 50% y 33% para establecer su máximo y mínimo. No, no podrás personalizarlo a tu gusto y esas opciones se sienten algo “estancas”.
Para evitar pequeños cortes, es mucho mejor mantener la escala máxima y mínima en el mismo valor, aunque implique desactivar el sistema dinámico. Además, el juego también cuenta con tres opciones estándar, pero la incorporación de otras opciones facilita la personalización de la experiencia, aunque los resultados disten mucho de ser perfectos.
Pero también os quiero contar que tal ha ido mi experiencia en Steam Deck. Sí, el juego que casi está llamado a ser el buque insignia de la experiencia en PS5 Pro también es compatible en el PC consolizado de Valve. La propia Square Enix se encargó de hacerlo público días antes de su lanzamiento y así he jugado varias horas al título.
Si bien es cierto que hay que empezar con mucha paciencia debido a sus más de 130GB de espacio y la precarga de sombreadores previa, el juego, una vez iniciado, no presenta ningún problema de compatibilidad y funciona de manera nativa. Como entenderéis que es obvio, no es la mejor experiencia para disfrutar el juego, pero también he de decir que su rendimiento es más que aceptable.
Hay pequeños trucos para sacar el máximo rendimiento posible del juego en Steam Deck. Puedes ajustar parámetros más minuciosos como el número de personajes opcionales presentes en pantalla en un momento dado, los detalles de las sombras individuales o el tipo de antialiasing.
Obviamente, para mantener una tasa de frames estable, sobre los 30, requiere de muchos sacrificios a nivel de detalle del personaje y de las texturas. Poniendolo todo o casi todo en bajo el juego aguanta el ritmo a nivel de tasa de cuadros, y es disfrutable plenamente si no buscar unos gráficos hiperrealistas.
Respecto a la duración de la batería en Steam Deck, ésta aguanta unas dos horas si no eres muy exigente en los detalles. Como suele ocurrir, esta duración variará en función del brillo de la pantalla, el nivel de volumen y si estás explorando el mundo abierto o mazmorras más cerradas.
En definitiva, Final Fantasy VII Rebirth llega a PC por todo lo alto y nos ha encantado seguir la historia de Cloud y compañía en Steam. Siendo totalmente compatible y jugable en Steam Deck, el rendimiento de este port nos ha convencido y creo que se ha hecho un mejor trabajo que en su anterior entrega. Eso sí, en equipos más modestos te verás obligado a tirar de “dopping” para mejorar su rendimiento, algo ya habitual cada vez más en PC.
PUNTOS FUERTES:
- En equipos potentes, es una auténtica gozada
- Bastantes ajustes gráficos y parámetros modificables
- Compatible en Steam Deck
PUNTOS DÉBILES:
- En equipos más modestos tendrás que tirar de técnicas de reescalado
- En Steam Deck has de hacer muchos sacrificios gráficos para mantener estables los FPS
