Análisis de The Summoning
Los años noventa. La pepsi molaba más que la Coca Cola; Nintendo sentía la presión por parte de Sega y su nueva consola de 16bits y el mundo del ordenador pasaba por un cambio generacional que revolucionaría con nombres propios. Honestamente yo no pude vivir tanto de esa época pero si me ha gustado leer sobre uno de los pioneros del RPG de acción que fue creado por Silicon & Sinapse; que luego serían conocidos por un nombre más común en la sociedad actual: Blizzard.
Con Diablo emergió un género en los ordenadores de la época cuyo fin no ha sido alcanzado incluso a día de hoy, pero, antes de Diablo existieron otros. Por supuesto, todo sabemos que la mayor influencia del juego de rol e incluso de toda la industria del videojuego fue Dragones y Mazmorras y en los años noventa existió un estudio y un título en común que bebía por todos sus píxeles de la obra de Gary Gygax y Dave Arneson.
The Summoning era un título desarrollado por Even Horizon Software; cuyo nombre no os sonará porque con el paso de la década de los noventa cambió su nombre a DreamForge Interactive -el nombre molaba- y que tal vez fueron más conocidos por realizar trabajos como Anvil of Dawn, Veil of Darkness o Sanitarium que sería, digamos, el desarrollo con más renombre de ellos.
Con una introducción lo bastante «clásica» ya que tendremos que personalizar -en menor medida- a nuestro personaje, tenemos claro que hemos sido convocados para derrotar a las fuerzas de un mal tiránico. Si, la historia no es que fuera rompedora… pero si que, desde el primer minuto, nos presentan una mecánica que fue revolucionaría en su momento: la forma de hablar con los NPCs del laberinto.
Al dialogar con ellos, podremos escribir palabras claves para que la conversación fluya y tengamos algo más de información del lugar en el que estamos o la dirección en la que tenemos que ir para avanzar en la aventura. Esta «tontería» me parece acojonante; una mecánica que pocas veces hemos visto en videojuegos actuales e incluso después de los años citados. Probé con escribir otras palabras y cada NPC reaccionará de manera diferente; positivo… o negativo.
La jugabilidad se basa en la típica del género y de la época, clickando en la dirección que queremos movernos por el mapa. Como buen juego de rol iremos subiendo de nivel; consiguiendo equipo nuevo y lucharemos con multitud de enemigos con el que cruzaremos espadas o lanzas. El combate es simple y no ha envejecido francamente bien. En cualquier caso, se entiende ya que estamos ante un port 1:1 de un título ya viejo.
Lo que si ha envejecido bien es el arte visual y sus pixeles; diría que fue una locura en la época de principios de año y su banda sonora también tiene esas tonadas sacadas de aventuras de fantasía. Lo que si hemos perdido por el camino era la traducción al castellano y creo que es fundamental en estas obras que el videojuego llegue a nuestro idioma. De lo contrario se haría cuesta arriba e incluso echaría atrás a gente que quiera ojear el pasado del videojuego.
Queremos cerrar el análisis de The Summoning es una apuesta por la preservación del videojuego; un título que a día de hoy no tendrá un público enorme pero si un nicho de jugadores que quieran explorar sus mazmorras y estudiar parte de la historia de la industria del videojuego. Más allá del aspecto retro nos encontramos con un buen rpg con mecánicas revolucionarias e ideas adelantadas a su época.
Puntos Positivos
- El uso de las palabras claves, una mecánica que sigue siendo revolucionaria
- Una historia de fantasía, brujería y llena de referencias de la cultura pop de la época
Puntos Negativos
- Ha envejecido mal
- Diversos bugs y crasheos
- No hay ninguna mejora de QoL
