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Análisis de Duck Detective: The Secret Salami

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ANÁLISIS DUCK DETECTIVE

A veces nos topamos con juegos que visualmente nos resultan atrayentes pero que en muchos casos se queda en eso, en una mera fachada. He de reconocer que cuando vi por primera vez imágenes de Duck Detective me llamó poderosamente la atención. Pero faltaba ver si en lo jugable era igual de potente como parece su estilo artístico. Así que acompañadme en este análisis para saber que me ha parecido Duck Detective: The Secret Salami.

HISTORIA

En muchos análisis y debido al género del juego, os he dicho que la historia acaba pasando a un segundo plano. No es este el caso del juego de Happy Broccoli Games. De hecho lo jugable ayuda a que la historia sea uno de los aspectos más importantes. Al fin y al cabo, ejercemos el papel de un detective privado, por lo que resolver el misterio principal que nos propone el juego será la experiencia troncal del mismo.

Más en detalle, seremos un detective privado. No uno cualquiera, sino un pato “humanizado”, en un mundo en el que todos los personajes serán “animorfos” en el sentido en que bajo una apariencia animal, pensarán y actuarán como homínidos. Así pues, nuestro personaje principal recurrirá a los tópicos de las novelas de detectives…. Abandonado por su amada, enganchado a las migas de pan (no, nada de alcohol en este juego) y demás tópicos a los que se recurre en estas ocasiones.

El punto de partida de la historia empezará como siempre, deberemos acudir a (en este caso) una oficina que gestiona una empresa de autobuses y de viajes, con la premisa de haber desaparecido el desayuno de uno de los empleados. A partir de ahí, como suele ser un clásico también, la historia se irá complicando y adoptando otro tono, mucho más solemne y magnánimo.

Eso sí, por muy serios que queramos ponernos, en este juego será imposible aguantar la risa. El tono de humor que se emplea es continuo y muchos de los diálogos son geniales chascarrillos y rupturas de la cuarta pared. Además, muchas de las situaciones que viviremos son muy cómicas y entrañables.

JUGABILIDAD

En lo jugable, estamos ante una aventura de de-duck-ción en la que deberemos interactuar con objetos y personajes para avanzar en la trama y dar con el mejor final posible a tamaño misterio. La premisa jugable es clara y diáfana: nosotros como detectives tendremos que recabar pistas (mediante la investigación del escenario, los objetos y demás personajes) para, cuando tengamos todas las pistas descubiertas, solucionar una especie de “mini-caso”.

Digo mini-caso por no decir frase. Me explico. Al descubrir hechos y objetos, ello nos aportará palabras clave que anotaremos de manera automática en nuestra libreta de detective. Con esas frases tendremos que rellenar los huecos de una frase que, una vez completa, nos aclarará que ha pasado en realidad. Cada hueco de cada frase podrá rellenarse con una palabra a escoger entre las varias descubiertas, pero sólo una será la correcta. Así que tocará tirar de memoria y de lógica para encontrar la solución.

El juego es amable y tiene varios sistemas de ayuda para que tu propósito sea más fácil. Por ejemplo podrás pedir pistas directamente. Aunque estas no son del todo explicitas y claras, pero seguro que te ayudan a orientarte. Por otro lado, en el momento de rellenar la frase, tendremos indicación de cuantas palabras estamos metiendo mal, si son 2, menos de 2 o más de 3 o 4. Eso te orientará para saber como de errado estás.

Además, también contaremos con un minimapa que nos ayudará a saber si tenemos algún diálogo pendiente con algún personaje, cosa que nos permitirá acumular aún más palabras clave. Una vez tengamos todas las palabras clave disponible para rellenar la frase (el mini-caso que os decía), el propio juego nos avisará con un icono para que procedamos a la deducción.

En definitiva, un juego de deducción que mediante la cómoda exploración de escenarios e interacción con NPC’s nos hará estrujarnos el cerebro (sólo un poco, que el juego no es muy difícil) para dar con la clave que nos permita seguir avanzando en nuestra investigación.

RENDIMIENTO Y AUDIOVISUAL

El apartado audiovisual es delicioso. Uno de sus puntos fuertes. A pesar de estar orientado hacia un tono “cozy” y familiar, lo bonito de sus gráficos y sus “parcas” animaciones (pues el movimiento es curioso cuanto menos) nos dan una muestra del encanto y del cariño que los desarrolladores han puesto en este juego.

Pero además de su cuidado aspecto gráfico, lo que sobresale por encima de todo es el doblaje. Aunque sólo en inglés y donde es el protagonista el que capitaliza casi todas las voces, me ha gustado mucho la voz y la actuación del actor de doblaje del detective. Si bien es cierto que pasaremos mucho tiempo leyendo y no hay cinemáticas como tal (en todo caso alguna secuencia tipo viñetas), el doblaje aporta un tono que eleva la producción a cotas muy altas para ser un indie y un título muy modesto en cuanto a valores de producción.

En cuanto al rendimiento, cero quejas también. De hecho, nuestra partida se ha desarrollado íntegramente en Steam Deck, sin haber ningún problema y a una tasa de 60 FPS sin bajón ninguno. Además, ajustando el TDP a 8 te da para acabarte el juego de una sentada, puesto que su duración de 2 o 3 horas es muy comedida.

CONCLUSIONES

En resumen, Duck Detective es uno de esos “pequeños grandes juegos” que sabe muy mal que pasen desapercibidos en el marasmo de tiendas como Steam. Con unos personajes entrañables, una historia que se sigue con interés y una jugabilidad simple pero entretenida, estamos ante una obra totalmente recomendable si te gustan las aventuras detectivescas. Su escasa duración (pero correcta para lo que cuenta) y su reducido PVP hacen de este juego un producto a tener en cuenta.

PUNTOS FUERTES:

  • Su estilo visual
  • La historia y lo cómico de ella
  • El actor de doblaje principal

PUNTOS DÉBILES:

  • Sólo está disponible en inglés
  • Aunque es correcta, escasa duración

Reseña
Jugabilidad
6.5
Historia
8
Gráficos
7
Entretenimiento
8
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Amante de los videojuegos, de todos!!
analisis-duck-detectiveEn resumen, Duck Detective es uno de esos “pequeños grandes juegos” que sabe muy mal que pasen desapercibidos en el marasmo de tiendas como Steam. Con unos personajes entrañables, una historia que se sigue con interés y una jugabilidad simple pero entretenida, estamos ante una obra totalmente recomendable si te gustan las aventuras detectivescas. Su escasa duración (pero correcta para lo que cuenta) y su reducido PVP hacen de este juego un producto a tener en cuenta.

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