IMPRESIONES MH STORIES COLLECTION PS4 – UNA AVENTURA ÉPICA
Monster Hunter siempre ha sido una de mis franquicias favoritas de videojuegos desde que lo probé y pude disfrutar con mis amigos en la calle gracias a la PSP y dónde con World encontré su máxima expresión, sin desmerecer a Rise que también fue un juegazo con todas las letras.
Como ya he dicho en varias ocasiones por motivos personales me limito a una consola, la PlayStation 5 en mi caso y eso me hace perderme algunas joyitas que por suerte han ido apareciendo.
He puesto el ejemplo de Monster Hunter Rise, que pude analizar con su llegada a PlayStation 5 tras su paso por Nintendo Switch, pero ahora le toca el turno además a dos entregas que se alejan a lo que nos tiene acostumbrado la franquicia.
Estoy hablando de Monster Hunter Stories y Monster Hunter Stories 2: Wings of Ruin que llegarán el próximo 14 de junio y de los que he podido disfrutar de más de 40 horas entre ambos, siendo el segundo a día de estas impresiones el que me queda todavía por terminar pero del que he llegado al punto hasta dónde puedo hablaros.
Son dos entregas únicas como podréis ver a continuación y que vienen de dos dispositivos diferentes, la Nintendo 3DS y Nintendo Switch, por lo que podremos ver su evolución y que además podrán adquirirse tanto por separado como por un pack.
Monster Hunter Stories
En esta primera aventura nos introducen el concepto de los Riders dentro del mundo de Monster Hunter que se aleja al concepto del cazador que conocemos pero que también mira por el equilibrio del ecosistema.
A diferencia de los cazadores, aunque no mucho, los Riders son capaces de crear vínculos con las criaturas que pueblan el mundo que conocemos gracias a un mineral llamado «piedra vinculante».
Gracias a ella podremos establecer una relación con aquellos «Monsties» domables que podremos ir «coleccionando» a lo largo del juego a través del robo de huevos.
Para que os hagáis una idea es como una especie de Pokémon pero con los monstruos de Monster Hunter ya que también los podremos usar en combate apostando además por una sólida historia dónde tras la aparición de la llamada «Plaga Negra» un Nargacaruga ataca nuestra aldea y provoca nuestro camino como Riders para intentar salvar el mundo y a nuestro amigo que busca venganza contra las criaturas que le han arrebatado «su vida».
Exploraremos el basto mundo que nos han creado para la ocasión para el que los Monsties son completamente esenciales. Con un equipo de 6 criaturas podremos alternarlas para poder superar diversos obstáculos y encontrar recursos a través de sus habilidades como por ejemplo el vuelo del Rathalos, la excavación del Barroth o el fuerte pico del Yian Kut-kut.
La aventura que viviremos cumple con todos los detalles necesarios para convertirla en épica y como todo Monster Hunter estará llena de misiones secundarias para que exprimamos todo lo que ofrece el juego.
Monster Hunter Stories 2: Wings of Ruin
En este caso seguimos con el concepto de los Riders pero ahora nos introducen una trama algo más oscura relacionada con el nacimiento de una variante de Rathalos muy especial. Una variante que es capaz de destruir el mundo con el solo batir de sus alas.
Al igual que en la primera aventura deberemos salir de nuestra aldea para descubrir ciertos sucesos que están ocurriendo alrededor del mundo provocados principalmente por una especie de agujeros que se abren en el suelo y que emiten una luz que altera a los monstruos.
En Wings of Ruin una de las cosas que más me ha llamado la atención es que se trata de una continuación directa de la primera aventura con un salto temporal de pocos años dónde podremos volver a ver a viejos conocidos y como han cambiado con el paso del tiempo.
A destacar de esta historia, a parte de lo que diremos posteriormente en la valoración de las diferencias, es esa apuesta por un tono más maduro dónde se nos plantean ciertas dudas y tomas de decisiones de nuestro protagonista (no las tomaremos nosotros ni hay desviación solamente es a nivel narrativo) que pueden dar que pensar bastante.
Una gran oportunidad para poder observar el salto generacional entre ambas entregas
Como hemos dicho tenemos la entrega original y la secuela por lo que el juego cuenta con una base principal que ha sido mejorada para la secuela. Y es que la primera entrega fue lanzada en 2016 mientras que la secuela fue lanzada en 2019.
Sus conceptos principales son:
- La crianza de los monsties a través de los huevos (para ello contaremos con un inseparable amigo que nos dará las claves gracias a su olfato para saber si encontramos alguna joyita)
- Los combates contra las criaturas acompañados de nuestro Monstie (incluidas batallas multijugador)
- La exploración de los mapeados para encontrar recursos
- Un postgame bestial (como nos tiene acostumbrados la franquicia)
- La personalización de nuestro personaje a través de los equipamientos)
Sus principales diferencias en estos conceptos principales:
- La crianza se expande ahora con los genes potenciando que dos mismas criaturas no se parezcan en nada al final.
- Ahora habrán combates dobles con otros cazadores, riders e incluso en su modo multijugador podremos realizar misiones cooperativas
- El mundo en Wings of Ruin se nota mucho más vivo al mostrar espacios más amplios pero con una pega (al igual que se siente vivo también se siente algo vacío al estar los monstruos tan localizados en los lugares)
- La personalización del equipo sigue siendo completamente igual añadiendo las armaduras superpuestas
- El apartado gráfico de la primera entrega es algo más cartoon mientras que la segunda apuesta por modelados «más realistas» al igual que el tono de la aventura.
- En la segunda entrega si superamos con bastante «holgura» a las criaturas enemigas podremos pulsar los gatillos para acabar el combate de forma instantánea evitando esos tediosos combates.
Datos importantes sobre su jugabilidad
Como hemos mencionado el juego cuenta con un sistema de combate dónde los cazadores podremos enfrentarnos a las diferentes criaturas acompañados de nuestros Monsties. En ambas entregas es completamente similar por lo que os lo resumiremos todo en un mismo apartado.
El juego cuenta claramente con un sistema de debilidades y fortalezas elementales como en cualquier Monster Hunter pero apuesta por un combate por turnos en vez de acción en tiempo real.
Durante los combates podremos elegir entre Ataques potentes, ágiles o técnicos siguiendo un esquema de Piedra>Papel>Tijera al que hay que añadirle también las habilidades vinculantes (que en el caso de Wings of Ruin) darán un salto al combinarse ambas. Deberemos estar atentos a los enemigos y a sus estados para saber que ataques escoger ya que por ejemplo cuándo están coléricos cambian su patrón de ataque.
A su vez también contará, en los monstruos grandes, un sistema de ataques a puntos débiles que deberemos saber atacar para romperles las partes a los enemigos y debilitarlos. Esto será esencial sobretodo aprenderlo para las misiones de desafío dónde deberemos acabar con los enemigos en un determinado número de turnos para obtener sus jugosas recompensas.
El juego apuesta por una monstruopedia bastante amplía en ambas entregas, al igual que la monstipedia (los que podremos montar), encontrándonos criaturas de todas las generaciones preparadas para la ocasión siendo los protagonistas esenciales los Rathalos pero también los Legianas, los dragones ancianos o los Kelbi que podremos ver por el mapa.
La recolección de recursos será bastante simple si lo hacemos montados en nuestros Monsties, cosa que recomiendo, ya que con un simple X podremos coger el recurso sin la animación por ejemplo de picar o agacharnos.
Por otro lado la aventura apuesta por una serie de mazmorras dentro de las guaridas de monstruos que simplemente son localizaciones ambientadas en el mapa que nos encontremos y generadas de manera aleatoria. Normalmente deberemos enfrentarnos a un monstruo que podremos domar al final de la zona aunque puede estar dormido o no aparecer. En la entrega original eran bastante simples pero en la secuela son más amplias aunque carecen de originalidad normalmente salvo por las Guaridas Antiguas que esas permanecerán siempre igual y que esconden algún que otro secreto.
Dos aventuras sin cambios en su lanzamiento en PlayStation 4
Debo destacar que ambas aventuras no han sufrido cambios para su lanzamiento en PlayStation 4 por lo que tendremos algunos pequeños problemas en su primera entrega dónde al correr veremos como cierto tironcejo, que no sucede cuando montamos.
Esto no es nada malo ya que el juego se ve absolutamente de lujo sobretodo a nivel aéreo dónde podremos ver a las criaturas pululando y observar detenidamente a nuestros objetivos.
Ya la segunda entrega me ha parecido una joya aunque no he podido evitar pensar en más de una ocasión que casi estaba ante Zelda Breath of the Wild sobretodo con las animaciones del correr y a la hora de coger objetos al igual que los modelados de los personajes (sobretodo el jefe de nuestra aldea).
Por suerte para los jugadores hay una gran cantidad de contenido que se ha ido lanzando tras el paso del tiempo y que estará disponible para explorar a gusto.
Normalmente suelo dejar un tráiler del juego, pero en esta ocasión os dejo el primer episodio de la serie compartida por la propia cuenta de Monster Hunter
Veredicto
No encuentro ninguna pega para que los amantes de la franquicia y de los amantes de los rpg no se lancen a su aventura. Son entregas que se pueden jugar poco a poco y sin agobios, que nos ofrecen historias que atraen bastante y que a nivel jugable son una gozada dónde si os resulta tedioso o lento el combate… podéis acelerarlo.
Mi recomendación es que le deis una oportunidad para conocer el mundo de Monster Hunter y sobretodo para los más peques de la casa ya que su sistema de combate es fácil de entender y no es frustrante además de que siempre es agradable controlar a un dragoncin inofensivo.
