PRIMERAS IMPRESIONES DE QUANTUM ODYSSEY
A veces los análisis que os traemos son descargas de adrenalina o juegos con “graficazos”. Pero, como dicen, en la viña del señor ha de haber de todo. Y hoy os traemos uno de esos juegos con los que se aprende más que se “juega”. Siempre con un entorno lúdico de fondo, hoy os hablamos de Quantum Odyssey, una propuesta en la que te podrás adentrar en el mundo de todo lo que tiene que ver con lo quántico. Como estamos ante un juego que está en acceso anticipado, os traemos tan sólo nuestras primeras impresiones.
En realidad, Quantum Odyssey es un simulador. Su objetivo es enseñarte cómo funciona esta tecnología de una forma divertida, utilizando una representación visual más que matemática. Con una sencilla interfaz llamada Forja, en el juego veremos columnas y «cables verticales» que corresponden a los distintos estados de los qubits. Lo que tendremos que hacer es colocar módulos (puertas cuánticas) para retorcer los hilos y transformar la información de entrada para que coincida con el resultado deseado. Así pues, y sin extenderme mucho más, el objetivo es mover, dividir, fusionar y cambiar el tamaño o el color de la bola colocando los módulos adecuados en el lugar adecuado.
Además de los impresionantes efectos visuales, cuenta con un famoso pedagogo que narra los tutoriales, definiciones de jerga en el ratón, una enciclopedia en el juego, muchas horas de contenido, literalmente cientos de puzles y desafíos creados por la comunidad.
Lo que si que quiero que quede claro es que no tienes que entender ni hacer ningún cálculo. Es sólo cuestión de colores y experiencia con cada puerta. Puedes divertirte simplemente siguiendo tu intuición, lógica y colores. No intentes entenderlos matemáticamente. Jugando más y experimentando más escenarios puedes aprenderlo todo.
Tendremos con una campaña que sigue un guion y que, a día de hoy, tiene muchísimo contenido a pesar de ser un juego en acceso anticipado. Pero es que además el juego también cuenta con una arena, vinculada a un editor de niveles, desde la que los jugadores compiten entre sí en las creaciones de la comunidad. Es una especie de deporte electrónico cuántico, basado en puntuaciones y optimización, en el que el objetivo es desarrollar un conocimiento común.
He de confesar que, aunque el aspecto visual ayuda a que el juego sea fácil de entender, en cuanto entres en materia te sentirás abrumado. Es por ello que este juego está dirigido principalmente a un nicho muy concreto de personas o jugadores. Aquellos que busquen puzles, que necesiten ampliar su conocimiento y que busquen retos que tomar y no dejar hasta acabarlos.
En todo caso, si sientes una mínima curiosidad por este tipo de juegos y retos, te animo a probarlo ya que su rebajado PVP lo hace más accesible. Además, el juego se lanzó el pasado 30 de enero y prometen estar aún en acceso anticipado entre 3 meses y un año, cosa que dará lugar a más mejoras y un título más redondo. Por el contrario, si eres de los que no disfrutan con los puzles y con los retos intelectuales, no te recomiendo que te adentres en Quantum Odyssey
