El lanzamiento de God of War: Ragnarok para PC ha sido un evento muy esperado, no solo por los fanáticos de la serie, sino también por aquellos que buscan experimentar la majestuosidad de la saga nórdica en una plataforma que promete el máximo rendimiento gráfico y una experiencia fluida. A continuación, realizamos un análisis extenso de este título, explorando su rendimiento en PC, jugabilidad, historia y aspectos técnicos.
Historia: El legado de Kratos y Atreus
La trama de God of War: Ragnarok sigue directamente los eventos del título de 2018, donde Kratos y Atreus, ahora adolescente, se enfrentan a los eventos que marcan el fin de los dioses nórdicos, el temido «Ragnarok». Lo que hace que esta secuela sea especial es su enfoque más íntimo en las relaciones personales. En el centro de todo está la dinámica entre Kratos, un padre que busca proteger a su hijo, y Atreus, quien lucha por encontrar su propio camino y su identidad en un mundo lleno de destinos predeterminados. A lo largo del juego, ambos personajes evolucionan y maduran, explorando temas como la paternidad, el destino y el sacrificio.
Sin embargo, Ragnarok no se limita a Kratos y Atreus. Personajes como Thor, Freya, y Odin son mucho más que antagonistas: se presentan con una profundidad inesperada. Thor, por ejemplo, no es solo un dios poderoso; su lucha con el alcoholismo y las relaciones familiares lo hacen más humano y comprensible. Odin también se aleja del arquetipo clásico de villano, mostrándose como una figura astuta y casi simpática. Esta dualidad en los personajes genera incertidumbre en cuanto a quién es realmente el enemigo, aportando frescura y complejidad a la narrativa
Jugabilidad: Combates más dinámicos y variados
La jugabilidad de Ragnarok mantiene las bases establecidas por su predecesor, pero introduce varias mejoras significativas. El sistema de combate sigue siendo brutal y fluido, con Kratos empuñando sus armas características, el Hacha Leviatán y las Espadas del Caos. Además, se ha añadido un sistema más profundo de especialización, que permite aplicar efectos como congelación o quemadura a los enemigos. Esto incentiva a los jugadores a cambiar entre armas según las circunstancias del combate
Una de las mayores críticas al juego de 2018 fue la falta de variedad en los combates contra jefes. Ragnarok responde a esto ofreciendo una amplia gama de jefes memorables, con peleas desafiantes que varían en sus fases y estilos. Las batallas contra Thor y otros dioses son algunos de los momentos más épicos de la saga, dejando al jugador impresionado tanto a nivel gráfico como jugable
Otra adición interesante es la alternancia entre los personajes jugables. Si bien la mayoría del tiempo controlas a Kratos, en ciertos momentos tendrás el control de Atreus. Este cambio introduce una nueva perspectiva, aunque algunos jugadores pueden encontrar estas secciones menos atractivas, ya que las habilidades de Atreus son más limitadas en comparación con las de su padre
Exploración y resolución de acertijos
Más allá de los combates, la exploración y los acertijos juegan un papel crucial en la experiencia de Ragnarok. Los jugadores visitarán los Nueve Reinos, lo que asegura una gran variedad de paisajes, desde los gélidos desiertos de Midgard hasta los vibrantes y vivos mundos de Alfheim y Svartalfheim. Este aumento en la diversidad de los escenarios ayuda a que la exploración nunca se sienta repetitiva o forzada. Además, muchos de estos lugares esconden secretos que requieren la resolución de ingeniosos acertijos, los cuales están mejor integrados con el entorno en comparación con el juego anterior.
Las zonas abiertas permiten una exploración más libre, y algunas regiones solo se desbloquean cuando se obtienen ciertas herramientas avanzadas en la trama. Esto hace que los jugadores deban regresar a lugares previamente visitados, pero siempre con nuevas rutas o desafíos que explorar, manteniendo la frescura en la experiencia
Rendimiento en PC: Belleza gráfica con algunos tropiezos
En términos gráficos, God of War: Ragnarok es un espectáculo visual. La versión de PC permite disfrutar del juego en resoluciones 4K y con una fluidez excepcional, siempre y cuando el equipo del jugador esté a la altura. Los paisajes detallados, los efectos de luz y sombra, y las texturas de alta calidad resaltan aún más en esta versión, aprovechando al máximo el hardware moderno.
Sin embargo, no todo es perfecto. Algunos usuarios han reportado problemas de rendimiento en ciertos reinos, como Svartalfheim, donde las tasas de fotogramas pueden caer de manera significativa, afectando la experiencia
Afortunadamente, estos problemas no son frecuentes y suelen ocurrir en áreas específicas, como las secuencias de viaje rápido en el «Reino Entre Reinos», que actúan como pantallas de carga interactivas.
Los jugadores han notado también que ajustar ciertas opciones gráficas, como la teselación, puede mejorar el rendimiento en las zonas problemáticas. En términos generales, el rendimiento en PC es bueno, pero para obtener una experiencia completamente fluida, puede requerir ajustar configuraciones o incluso actualizar el hardware
Duración y contenido adicional
Completar la historia principal de Ragnarok puede llevar alrededor de 30 horas, pero el contenido adicional, como las misiones secundarias y la exploración de los Nueve Reinos, puede duplicar fácilmente ese tiempo. Estas misiones opcionales no son simples rellenos; a menudo ofrecen detalles importantes sobre la historia y los personajes, así como enfrentamientos desafiantes y secretos ocultos.
Además, el DLC incluido en la versión de PC, Valhalla Mode, introduce un modo de juego roguelike, en el que los jugadores enfrentan oleadas de enemigos en arenas, mejorando a Kratos con cada enfrentamiento. Este contenido añade aún más rejugabilidad al juego, ofreciendo a los jugadores veteranos una razón para seguir jugando incluso después de haber completado la historia principal.
